Habitantes de la ciudad fronteriza de Nuevo Laredo, en Tamaulipas, iniciaron el 2020 con una agitada tarde de balaceras, la cual se prolongó durante varias horas y que dejó un saldo de un policía muerto y tres presuntos criminales abatidos.
Durante la agresión, supuestos integrantes de la Tropa del Infierno, una célula que integra a sicarios del Cartel del Noreste, incendiaron un negocio de azulejos y quemaron vehículos particulares, además de robar otros para bloquear con ellos las principales vialidades de esa ciudad.
El Grupo de Coordinación para la Construcción de la Paz en Tamaulipas informó que personal de la Policía Estatal fue agredido por sujetos fuertemente armados, mientras realizaban sus patrullajes en la colonia San Rafael, a menos de un kilometro de distancia del Puente Internacional número II Juárez – Lincoln.
Según el reporte oficial los agresores habrían disparado contra el hotel Villarreal, en el cual se hospedaban elementos de la Policía Estatal Acreditable, dejando a uno de ellos lesionado por proyectil de arma de fuego; durante la balacera, un civil más resultó herido al ser alcanzado por las balas cuando mientras se encontraba dentro de una tienda de conveniencia.
En un video compartida en redes sociales se observa a policías estatales quienes se atrincheran dentro del hotel mientras se lleva a cabo el tiroteo, “estamos recibiendo agresiones al interior del hotel Villareal… están tirando con calibre .50, R-15 y al parecer cuerno (de chivo).
El reporte de las autoridades indica que tras los enfrentamientos tres de los agresores fueron abatidos, aunque también del lado de los policías hubo perdidas, luego de que uno de sus integrantes muriera durante el tiroteo.
Destacó que los elementos del Cartel del Noreste viajaban a bordo de varias camionetas y vestían indumentaria similar a la que usa personal de la Marina.
Ya entrada la noche los sujetos armados se dirigieron al hospital San José en donde habrían disparado sus armas de grueso calibre contra transformadores eléctricos con el fin de afectar el suministro de energía al interior del nosocomio en donde era atendido personal de la policía del estado.
Minutos antes de las diez de la noche, a través de la cuenta de Twitter del Consulado General de los Estados Unidos en Nuevo Laredo, aconsejó a sus trabajadores del gobierno a refugiarse en lugares seguros, así como notificar a “sus amigos y familiares sobre su seguridad”.
Minutos más tarde en esa misma red social, el gobernador del estado de Tamaulipas, Francisco Cabeza de Vaca reconoció la “firmeza y valentía” con que los “buenos policías estatales” enfrentaron a los criminales.
A través de esta misma red social circularon fotografías tomadas por los habitantes de esa ciudad fronteriza, en las que se observa cómo fue que pasaron las horas de angustia durante los enfrentamientos. Algunos tuvieron que refugiarse dentro de un centro comercial. De igual forma hubo suspensión y retrasos en las corridas de las líneas de transporte en autobuses que recorren la zona.
JLP