El monseñor Salvador Rangel Mendoza, Obispo Emérito de la Diócesis de Chilpancingo-Chilapa, señaló que no presentará denuncias contra las personas que le hicieron daño.
A través de una carta explicó lo siguiente:
"Después de haber hecho oración, meditado profundamente y de haber consultado con mis seres queridos, tanto del clero como laicos y, en razón de que lamentablemente mi vida, edad y mi salud están en condiciones desfavorables, siguiendo los principios evangélicos de nuestro Señor Jesucristo, que perdonó a las personas que lo traicionaron, lo vendieron, lo juzgaron, lo torturaron y lo asesinaron, con todo mi corazón perdono a todas las personas que me han hecho daño por los hechos de los que he sido víctima, así como a aquéllos que me han revictimizado producto de la desinformación.
Por lo tanto, en ejercicio de mis derechos constitucionales, no presentaré ninguna denuncia contra las personas que tanto mal me han hecho. Y pido a los medios de comunicación me comprendan y respeten mi decisión encaminada al bien de mi seguridad e integridad física y moral.
No olvides seguirnos en Google Noticias para mantenerte informado
Agradezco infinitamente a todas las autoridades, tanto legales como eclesiásticas, que han colaborado en este caso, y de manera muy especial al Mtro. Luis Gasca, quien ha sido mi abogado.
Agradezco a todas las personas que se han solidarizado conmigo. Mi especial gratitud a todos aquellos que hicieron oración por mi vida y por mi pronta recuperación."
El obispo de Chilpancingo, Monseñor Salvador Rangel Mendoza, fue localizado con vida en un hospital público de la ciudad de Cuernavaca, en Morelos a finales del mes de abril, luego de haber sido reportado como desaparecido.
Síguenos en Facebook: La Prensa Oficial y en Twitter: @laprensaoem