Las deficiencias y carencias en los Servicios de Salud de Morelos son resultado de una cadena de complicidades que involucra al gobernador Cuauhtémoc Blanco, el titular de Servicios de Salud, Héctor Barón, y las instancias responsables de vigilar el cumplimiento de normas sanitarias, Cofepris y Coprisem.
Así lo explicó en entrevista la presidenta de la Comisión de Salud del Congreso local, Andrea Gordillo, quien lamentó que los sucesos hechos públicos hace una semana en el Hospital General de Cuernavaca “Dr. José Parrés” se atribuyan a la falta de presupuesto.
“En diciembre, para la discusión del Paquete Económico 2022, mandamos comparecer a todos los Secretarios para que nos comentaran las necesidades que tenían. En el tema de salud recibimos al doctor Marco Antonio Cantú y al doctor Héctor Barón, titular de la Dirección de Servicios de Salud, encargada de los hospitales en el estado, en ningún momento nos solicitaron la necesidad de una ampliación (presupuestal)”, detalló la diputada Gordillo.
En 2021, los Servicios de Salud venían trabajando con un presupuesto de 2 mil 149 millones el cual solicitó ampliarse solo a 2 mil 329 millones, una diferencia de apenas 4.5 por ciento debajo de la inflación anual, lo cual no significaba un cambio considerable, comentó la presidenta de la Comisión de Salud.
De ahí que no sea válido que ahora el titular de los Servicios de Salud se escude en este tema, sin embargo, explicó, sí hay que destacar que existen dos normas sanitarias que no son cumplidas, la NOM-045-SSA2-2005 y NOM-016-SSA3-2012.
Ambas, detalló la legisladora, se refieren al mantenimiento preventivo de la infraestructura y el equipamiento, por lo tanto, si se cumpliera y se hicieran cumplir no habría descomposturas que limiten la continuidad de operaciones de los hospitales y centros de salud dependientes de los Servicios de Salud.
Es en este punto donde puede visibilizarse la cadena de complicidades, pues en primera instancia, la vigilancia, multa e inicio de un proceso administrativo en contra de quienes incumplan, es responsabilidad de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), en lo Federal, y la Comisión para la Protección contra Riesgos Sanitarios del Estado de Morelos (Coprisem), en lo local.
Desafortunadamente, precisó, la Coprisem está encargada además de la Dirección de Servicios de Salud, lo cual la hace juez y parte, y esto la imposibilita para autocalificarse.
En segunda instancia, el doctor Barón es responsable del mantenimiento preventivo de la infraestructura y el equipamiento de los 12 hospitales y los 204 centros de salud de la entidad.
Y en tercero, la responsablidad que recae en el Mandatario estatal radica en que no ha tomado cartas en el asunto sobre el titular de Servicios de Salud, expuso Andrea Gordillo, aunque destacó no son tiempos de confrontación sino de trabajo.
Al respecto, por el momento, dijo, desde la Comisión de Salud se está generando un acuerdo para solicitar un acta a la Coprisem con información que indique cuántas veces han ido a verificar los hospitales y centros de salud.
Asimismo, en la sesión de la próxima semana presentarán tres puntos de acuerdo, uno para instruir a la Entidad Superior de Auditoria y Fiscalización (ESAF) a realizar una revisión al presupuesto ejercido por los Servicios de Salud.
Un segundo punto será para solicitar el apoyo de la Auditoría Superior de la Federación (ASF) a fin de que verifique que los fondos federales recibidos son gastados de manera pertinente.
Y un tercero que será entregado ante el Congreso de la Unión, a propósito de que una reforma de ley que brinde de autonomía a la Cofrepis, de esa manera la supervisión y verificación de la infraestructura hospitalaria y servicio sería independiente.
Adicionalmente, en la próxima sesión ordinaria se fijará fecha y hora para que el doctor Barón Olivares, comparezca y explique el tema de las deficiencias de los hospitales.
La presidenta de la Comisión de salud del Congreso local reconoció que la situación de salud en Morelos es crítica desde hace varios sexenios, no obstante, frente a los recientes sucesos la política debe empezar a cambiar.
“No solo en el estado (de Morelos) sino en México. La falta de profesionalización el tecnicismo, el respeto al cargo. Mi objetivo es darle una solución a este problema de antaño en cuanto a acciones concretas desde el Congreso, que no se van a quedar en los tres puntos de acuerdo, vamos a trabajar con un plan real que podamos presentárselo al Ejecutivo (local) y no solo ser confrontativos sino vigilantes.
“Hoy no se trata de un color (de partido) o la política, hoy es la salud de las y los morelenses”, planteó Gordillo.
La legisladora se dijo esperanzada porque el Gobernador Cuauhtémoc Blanco tome acciones en caso de que haya funcionarios que deban ser responsablizados y, en su caso, castigados y, en general que valore qué personas deben o no estar en un cargo, en una Secretaría, según sean los casos.
“Hago un llamado al Gobernador para que vea los verdaderos resultados de los secretarios o de los dependientes de éstas para que avale o no si están bien para su cargo”, consideró la legisladora.
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Andrea Gordillo reconoció el trabajo que se está haciendo con el Comisionado de los Derechos Humanos (CDH), Israel Hernández, quien ya ha hecho las denuncias correspondientes sobre las deficiencias en los Servicios de Salud ante la Fiscalía Anticorrupción.
“Estamos haciendo un buen equipo, él (Ombudsperson) ha llegado a la Fiscalía Anticorrupción a hacer la denuncia pertinente, nos ha hecho unas recomendaciones, vamos de la mano y por ello solicitaremos la comparecencia ante el Congreso del titular de los Servicios de Salud”, expuso la diputada.
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