Un colaborador del Cartel de Sinaloa fue uno de los objetivos prioritarios del fuerte operativo desplegado la tarde del sábado entre marinos, policías y la fiscalía capitalina en calles de la colonia Morelos, se trata de Josué Ramón "M", también conocido como el "Pollo".
Junto al “Pollo”, el operativo derivó en la detención de otros dos hombres y tres mujeres, quienes se encontraban en alguno de los ocho inmuebles que contaba con una orden cateo solicitadas por la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México, luego de una serie de investigaciones preliminares.
Para la captura del probable colaborador del Cártel de Sinaloa, el operativo se desplegó por aire y tierra, a través de sobrevuelos de dos helicópteros, uno tipo Cóndor de la Secretaría de Seguridad Ciudadana y uno más tipo Blackhawk, este piloteado por personal de la Secretaría de Marina.
Mientras tanto, en tierra, un gran número de unidades dichas corporaciones y de la Fiscalía capitalina cercaron las calles de Granada, Gorostiza, Tenochtitlán, Toltecas y en la Avenida del Trabajo, mientras agentes se adentraban en los inmuebles investigados donde lograron las capturas y fuertes aseguramientos de droga.
Ante de su aprehensión en el corazón de la colonia Morelos, el “Pollo” ya había sido capturado en el municipio de Zumpango por sus presuntos vínculos con la organización criminal de Sinaloa, a pesar de la gravedad de los señalamientos y que fue detenido con droga, logró recuperar su libertad y abandonó el Penal Federal del Altiplano.
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Anteriormente, en el 2016, también fue detenido en calles del barrio de la Tepito, mientras transportaba en una motoneta cinco paquetes con una sustancia similar a la cocaína cerca del cruce de las calles Tenochtitlan y Fray Bartolomé de las Casas.
Tras su más reciente captura, el “Pollo” de 36 años de edad, volverá a enfrentar un nuevo proceso judicial, este por haber sido detenido junto con por lo menos 40 kilogramos de marihuana contenida en diversos recipientes y bolsas, una bolsa más con la droga denominada “hachís”, un recipiente más con un aproximado de 1.3 kilogramos de metanfetamina, así como basculas grameras, una máquina para sellar, libreta con anotaciones sobre la venta de droga y teléfonos celulares.
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