Policías de la Secretaría de Seguridad Ciudadana capitalina, utilizaron toda su energía, autoridad y fuerza, para detener y subir a una patrulla, a una mujer que vendía churros en la calle, sin embargo, testigos lo impidieron destacando que así deberían haber actuado para evitar los destrozos en la ciudad de México, que causaron vándalos el pasado dos de octubre.
Al respecto, la Secretaría de Seguridad Ciudadana capitalina, informó que en relación a la posible agresión por parte de uniformados de esta dependencia a una comerciante que se encontraba en avenida de Los Insurgentes y Eje 2 Norte Manuel González, indicó que se indaga abuso de autoridad de los uniformados.
Señaló la dependencia que los uniformados, al realizar funciones de seguridad, solicitaron a una vendedora de churros el permiso correspondiente.
Al no contar con él, se le intentó remitir al juzgado cívico, como indica le Ley de Cultura Cívica de la Ciudad de México.
La mujer comenzó a pedir apoyo de las personas que pasaban por el lugar, quienes no permitieron que fuera subida a la patrulla, y durante el jaloneo la canasta con la mercancía cayó al suelo.
La mayoría de los churros quedaron regados en el suelo, y la mujer presa de la impotencia y con lágrimas, continuó con la venta de los pocos, que le quedaron en su canasta.
La Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) de la Ciudad de México, destacó que "refrenda su compromiso de investigar y revisar la mala actuación policial dolosa o el abuso de autoridad, mismos que se castigan de forma inmediata".
Añadió que pondrá a disposición de las autoridades ministeriales, a los efectivos que resulten involucrados, para que se proceda conforme lo que marca el código penal vigente.
HM
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