La tarde del viernes una llamada anónima al centro de mando denunció el maltrato físico hacia un niño. Como resultado de esto un grupo de elementos de la Comisaría General de Seguridad y de la Procuraduría del DIF-Tecámac arribó a la unidad habitación Urbi valle de San Pedro para corroborar los hechos.

En el lugar encontraron a un niño de 3 años a quien se le apreciaban diversas lesiones en todo el cuerpo por lo que tuvo que ser trasladado de emergencia a bordo de una ambulancia a un hospital de Ecatepec para descartar un traumatismo craneoencefálico y/o abdominal tras los golpes propinados por las personas que lo tenían a su cargo.

A estos hechos se le sumó lo acontecido cinco días antes cuando se presentó otro caso donde un niño de 5 años tocó un botón de pánico cercano a su casa en la unidad habitacional Los Héroes Tecámac. Al sitio arribó una unidad de la Policía Municipal y los oficiales indicaron que encontraron a un pequeño llorando el cual señaló que vivía muy cerca del lugar.

Al niño se le apreciaron huellas visibles de lesiones en su rostro y antebrazo; sin embargo su madre del menor aseguró que las lesiones fueron provocadas “por una caída que sufrió en la escalera de su casa”.

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Tras esto, otro familiar de la víctima que fue localizado mencionó a las autoridades que era la segunda ocasión que el niño “se caía” de las escaleras por lo que el personal de la dependencia determinó que la mujer al parecer es fármaco dependiente y que el niño ha estado expuesto desde hace tiempo a extrema violencia física.

En ambos casos los dos niños fueron retenidos en las instalaciones del Sistema DIF-Tecámac y fueron enviados al albergue municipal hasta que las autoridades determinen su situación.

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