HUIXQUILUCAN, Méx., 18 de Octubre.- Dos hombres de 40 y 69 años de edad fueron asesinados a balazos por un par de delincuentes que los sorprendieron y les dispararon en repetidas ocasiones con armas de fuego desde una motocicleta en marcha, momentos después de que sacaron dinero de un cajero automático.
Consumado el doble asesinato, los presuntos homicidas que a decir de la policía ya estaban esperando a los occisos y que llegaron a tiro directo para quitarles la vida a tiros, al parecer en una venganza, pues no les robaron el dinero, imprimieron velocidad a su caballo de acero para darse a la fuga y perderse entre las calles del lugar, sin que hasta el momento se sepa nada de su identidad y posible paradero.
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Los hechos que costaron la vida de estos dos hombres, identificados como Ángel “N”, de 69 años de edad y Jhonatan, de 40, el primero de ellos vecino de la Alcaldía Azcapotzalco, en la ciudad de México y el segundo del municipio de Tlalnepantla, se registraron minutos antes de las tres de la tarde de este miércoles, exactamente en la entrada del estacionamiento del Hospital Ángeles, ubicado sobre el Paseo Interlomas, en la exclusiva zona residencial de Interlomas, en este municipio.
Autoridades policíacas informaron que de acuerdo a las primeras investigaciones que se realizaron, los dos hombres acababan de retirar una cantidad de dinero de un cajero automático, cuando fueron sorprendidos por dos sujetos que ya los estaban esperando a bordo de una motocicleta.
Los ahora occisos que al parecer ya conocían a sus verdugos, al percatarse de su presencia y de que ya los estaban esperando, corrieron para darse a la fuga, sin embargo, no lograron su objetivo, pues los presuntos delincuentes al darles alcance les dispararon en repetidas ocasiones con armas de fuego.
A consecuencia de los múltiples balazos que recibieron, los dos hombres cayeron al piso heridos de muerte, por lo que algunas personas que caminaban por el lugar llegaron con la intención de auxiliarlos y pedir el apoyo de una ambulancia para que recibieran atención médica de urgencia.
Sin embargo, cuando las mismas personas que se encontraban en el lugar tuvieron de frente a los baleados, una de ellas dijo “ya valió madres” porque se percató que el estado de salud de los dos hombres era muy grave y que agonizaban.
Minutos más tarde cuando personal del hospital Ángeles llegó y trató de brindarles los primeros auxilios a los baleados confirmaron que ambos ya estaban muertos.
Después de que se confirmó la muerte de estos dos hombres, policías municipales que llegaron en atención a un llamado de auxilio acordonaron toda la zona y pidieron la intervención del Ministerio Público para que diera fe de los hechos, al tiempo que desplegaron un fuerte operativo, a fin de ubicar y detener a los presuntos homicidas, pero no tuvieron suerte, pues escaparon sin dejar pistas de su paradero.
Durante las primeras inspecciones oculares que practicó en la escena del crimen, el MP informó que los occisos quedaron separados, uno tirado sobre su costado izquierdo en la cinta asfáltica y el otro boca abajo en la entrada del estacionamiento del Hospital Ángeles y que ambos presentaban al menos dos balazos en diferentes partes de su cuerpo.
Concluidas las diligencias ministeriales y una vez que ordenó el levantamiento de los cadáveres, el MP dio inicio a la carpeta de investigación correspondiente por el delito de homicidio.
En tanto, en un intento por establecer con exactitud cuál fue el móvil del doble homicidio y quiénes los responsables para buscarlos y detenerlos, elementos de la policía de investigación mexiquense ya iniciaron con sus trabajos policíacos y ahora solo se espera que en verdad tengan resultados, pues sería lamentable que por incapacidad de la FGJEM se vuelva a dar un hecho de impunidad en el Estado de México.
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