Un hombre en condición de calle, resultó herido por arma blanca durante una pelea ocurrida en el perímetro de la colonia Guerrero, perteneciente a la alcaldía Cuauhtémoc. No ameritó traslado hospitalario.
De acuerdo con los primeros reportes, el individuo conocido como "El Cholo", al parecer sostuvo una riña con otro sujeto por diferencias personales. Su oponente hizo uso de una navaja, con la cual le causó un corte a la altura del abdomen.
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Luego de verse lesionado, la víctima de aproximadamente 29 años de edad, buscó refugio en la esquina de avenida Paseo de la Reforma y Eje 1 Norte, López Rayón, en donde habitualmente pernocta con otras personas en condición vulnerable.
Tras los hechos ocurridos aproximadamente a las 19:00 horas de este jueves, conocidos del masculino atacado llamaron a unos elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la CDMX, pertenecientes al Sector Buenavista que patrullaban por la zona y estos solicitaron la intervención de los servicios de emergencia.
Paramédicos pertenecientes al cuerpo de Protección Civil de la alcaldía referida, acudieron a prestar atención médica a "El Cholo", quien permaneció sentado en un sillón viejo, colocado sobre uno de los respiraderos del Metro de la CDMX, justo sobre la banqueta que divide los carriles laterales de los centrales de Reforma, a unos metros de la estación del Metrobús Garibaldi.
"Yo me aventé un tiro por humildad carnal, pero el otro wey traía una punta", dijo el sujeto agraviado ante la mirada de sus compañeros, de los policías y de los técnicos en urgencias médicas.
"Yo creo que fue un wey que ya lo traía desde en la tarde cuando fuimos al comedor de las madres. Le dijo que se quería sacar un tiro, pero no sé cómo se llama", comentó una mujer con preocupación.
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Entre trapos y ropa sucia, el lesionado, mismo que traía puesta una playera sin mangas, fue valorado y tras realizarle una curación rápida, los técnicos en urgencias determinaron que no requería traslado hospitalario.
Ahí se quedó platicando con sus compañeros, mientras que algunos de estos comían unos tamales envueltos en hojas de maíz, puestos sobre una bolsa de plástico. Cada quien metía la mano y llevaba un trozo a su boca.
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