Un hombre de aproximadamente 40 años de edad, quien conducía su vehículo en Tlalnepantla, falleció por hipotermia, luego de que la granizada que cayó la tarde-noche del lunes atrapó su automóvil en el desnivel de Mario Colín y Avenida de los Maestros, el cual cruza debajo del Periférico.
De acuerdo con el encargado del área de protección civil, Hugo César Mendoza Castillo, el hombre fue sacado de su coche cerca de la media noche, después de más de tres horas de intensas labores para remover la acumulación de granizo.
En entrevista con LA PRENSA, el funcionario manifestó que paramédicos del municipio, junto con bomberos y cuerpos de auxilio acudieron al lugar para apoyar a otros tres automovilistas.
Dijo que estas personas también quedaron varadas en medio de los bloques de hielo, que en cuestión de minutos se acumularon en el desnivel, al deslizarse de los extremos del bajo puente conforme aumentó la caída de granizo.
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Los primeros peritajes señalan que el túnel quedó anegado por el agua proveniente de las calles aledañas que arrastraron hielo y agua. A la mayoría de los autos se les apagaron sus motores por fallas mecánicas
El funcionario aseveró que la tromba azotó a Tlalnepantla y a varios municipios circunvecinos, provocando serias afectaciones en varios puntos. “No fue para menos, dentro de lo que cabe, actuamos lo mejor que pudimos. Lo más fuerte fue en Valle Dorado”, dijo.
Mencionó que las tres personas rescatadas en el sitio de Mario Colín y Avenida de los Maestros fueron llevadas a revisión médica, luego de ser estabilizadas en el lugar por los paramédicos del municipio, y que el hombre de 40 años de edad lamentable no resistió las bajas temperaturas y murió por hipotermia.
En ese caso tuvo que intervenir el trabajo del Ministerio Público para realizar el levantamiento del cuerpo y sacarlo del auto compacto Honda color negro, donde quedó inconsciente y finalmente pereció.
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Relató que en el momento de la emergencia, conforme se desbordó la acumulación de granizo, mismo que según el funcionario superó los 80 centímetros de altura, los automovilistas debieron haber llamado por teléfono a sus familiares.
“De los tres que se sacaron, en dos de ellos llegaron sus familiares ahí por ellos; solo valoramos y estabilizamos su temperatura por el hielo y el agua tan fría que estaba. No tuvieron mayor consecuencia”, añadió.
Afirmó que sus parientes indicaron que los llevarían a revisión médica, aunque ya iban bien. Mencionó que el otro automovilista, en una decisión de ponerse a salvo, se subió al toldo de su vehículo para evitar el hielo y las aguas frías.
“El otro que rescatamos del toldo sí traía hipotermia, Fue estabilizado ahí con los paramédicos hasta que llego su familia y ellos los iban a trasladarlos al hospital”, subrayó Hugo César Mendoza Castillo.
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