Una mujer de la tercera edad que se dedicaba a vender comida, murió tras ser embestida por un mucrobús en el perímetro de la colonia Verónica Anzures, en la alcaldía Miguel Hidalgo. Regresaba de hacer compras en el mercado.
Vestida con un mandil azul y cargando una bolsa que contenía jitomates, limones y cebollas, la señora Cristina intentó cruzar la avenida Marina Nacional y justo en la esquina con Bahía de Ascensión, una unidad perteneciente a la ruta 1, la impactó metros antes de que lograra llegar a la acera.
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Tras el fuerte golpe, la víctima, quien tenía un puesto de comida por la zona, cayó al pavimento y quedó debajo del vehículo con algunos pasajeros a bordo, el cual hacía unos minutos había salido de su base ubicada muy cerca de donde ocurrió el accidente.
La abuelita, muy apreciada por comerciantes del lugar, recibió un fuerte golpe en la cabeza que la dejó inconsciente, pero aún respiraba. De inmediato la gente se acercó para intentar auxiliarla y amenazaron con golpear al chofer, de aproximadamente 25 años, quien impactado y mostrando nerviosismo permaneció en el sitio.
"Ya no pudo frenar"
"Yo vi que varias personas cruzaron la avenida juntas, pero como que ella se quedó al último y el del micro aceleró para dar la vuelta. Todavía gritó y alzó la mano, pero el chavo ya no pudo frenar", dijo una mujer que vende tamales y atole en compañía de su hijo, casi frente a donde ocurrió la tragedia.
Tras los hechos registrados aproximadamente a las 9:00 horas de este viernes, elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la CdMx, se presentaron en el lugar. Luego de detener al conductor y subirlo a una patrulla, solicitaron la presencia de los servicios de emergencia.
"La ambulancia tardó mucho en llegar", afirmó un testigo. Al arribo de los paramédicos pertenecientes al Escuadrón de Rescate y Urgencias Médicas (ERUM), la mujer ya no contaba con signos vitales. Fue cubierta con una manta en color azul, a la cual se le colocaron unas piedras en las esquinas para que el aire no la levantara.
Un hombre de aproximadamente 40 años de edad, vestido con un chaleco reflejante y con botas de trabajo, se identificó como hijo de doña "Cristi" y cruzó el acordonamiento buscando el cuerpo. Al tenerlo cerca se tiró al piso. Entre llantos y lamentos le besó la mano en repetidas ocasiones.
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"Todavía estaba bien fuerte mi mamá"
"Era bien movida la señora, andaba en chinga entregando comida aquí y allá. Que desgracia para ambas personas, porque el del micro no creo que haya salido a trabajar diciendo "a ver a quién atropello" y la señora "a ver a quien meto en una bronca". Es de lamentarse", dijo un hombre, empleado de una agencia de autos ubicada por el rumbo.
Poco a poco, conocidos y familiares de la víctima iban llegando al sitio y al verse entre sí, las lágrimas se hacían presentes. Los abrazos no alcanzaron para dar consuelo a los hijos de la finada, mismos que no dejaban de lamentar la pérdida. "Todavía estaba bien fuerte mi mamá", dijo uno de ellos durante una llamada que hacía por su teléfono celular.
Aproximadamente a las 11:20 horas, integrantes del área pericial y Forense de la Fiscalía capitalina, se presentaron para realizar el levantamiento del cadáver para trasladarlo al anfiteatro correspondiente, luego de que el microbús que se dirigía hacia Coyoacán, fuera levantado con ayuda de una grúa.
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