El último aliento que dio un hombre supuestamente asaltado a mano armada, fue ante un grupo de militares, quienes lo vieron desvanecer y morir.
Información policial indica que el ahora extinto fue víctima de la delincuencia sobre la carretera Pachuca-Tulancingo, la madrugada de ayer martes, donde probables delincuentes lo apuñalaron en varias ocasiones.
Después condujo su vehículo hasta la entrada al municipio de Epazoyucan, a la altura del sitio conocido como Piedras Negras, donde encontró a unos soldados que recorrían zona de ductos en el municipio.
Descendió ensangrentado y les dijo que lo habían asaltado, que lo ayudaran. Antes de que los militares se acercaran más a él, se desvaneció y ya no despertó.
El reporte de los hechos fue canalizado a la Policía Municipal, cuyos elementos y cuerpos de auxilio dieron cuenta del deceso del hombre, quien no pudo dar más detalles de sus agresores.
Se informó que presentaba varias heridas de arma blanca y viajaba en un vehículo tipo Focus, de color rojo, con placas de la Ciudad de México.
Posteriormente acudieron peritos en criminalística y agentes investigadores de la Procuraduría General de Justicia del Estado de Hidalgo (PGJEH), para levantar las diligencias de rigor y llevar el cadáver al Servicio Médico Forense (Semefo), al tiempo que se inició una carpeta de investigación.