Maricela “N” de 56 años fue ejecutada a balazos al interior de su puesto de ropa, en el tianguis de la colonia Ejercito de Oriente, en Iztapalapa; los agresores le dispararon a bocajarro en al menos cinco ocasiones y escaparon de inmediato.

Presuntamente, la víctima fue amenazada de muerte por un interno del Reclusorio Preventivo Varonil Sur, relacionado con el homicidio de su hermano, en octubre de 2019 en la misma colonia.

“La señora vendía ropa con su familia, todos ellos son muy violentos (…) dicen que ellos mataron a un chavo hace unos días y que ahorita vinieron a vengarlo”, comentó un vendedor de comida.

La mañana de este sábado, la señora Maricela se encontraba al interior de un puesto semifijo cuando la abordó un sujeto desconocido vestido de negro.

El varón -sin mediar palabra- sacó un arma de fuego y le disparó a corta distancia en repetidas ocasiones; “nosotros escuchamos como cinco balazos y nos tiramos al suelo”, sostuvieron los presentes.

“Ya después el chavo se fue caminando por las callecitas pero nadie lo volteó a verlo, yo creo que por miedo”, continuó un vendedor de alimentos.

Otros sujetos detallaron que la familia de la victima es conocida en el barrio por ser “muy violentos”, además de que están posiblemente relacionados con el homicidio de otra persona.

Tras recibir el reporte de la balacera, elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) de la Ciudad de México arribaron al cruce de Exploradores de Ejército de Oriente y Rafael Ballesteros.

Al observar el cuerpo tendido sobre la cinta asfáltica con visibles heridas solicitaron apoyo de cuerpos de emergencia para que valoraran a la agredida.

Minutos después, paramédicos del Escuadrón de Rescate y Urgencias Médicas (ERUM) intervinieron en el lugar e intentaron brindarle primeros auxilios, pero al revisar sus signos vitales solo diagnosticaron su muerte.

La mujer -que presentó al menos tres impactos de proyectil de arma de fuego- quedó recostada bocarriba a un costado del camellón que divide ambos carriles.

Finalmente, servicios periciales de la Fiscalía General de Justicia (FGJ) capitalina tomaron fotografías del lugar, recolectaron los casquillos percutidos y trasladaron el cadáver al anfiteatro correspondiente.

Policías de investigación (PDI) se entrevistarán con los familiares de la occisa a fin de corroborar la hipótesis de las posibles amenazas de un recluso.