La tienda de conveniencia -en donde se registró un incendio la noche del pasado 9 se septiembre- permanece bajo investigación de servicios periciales de la Procuraduría General de Justicia (PGJ) capitalina, a fin de determinar si se trató de un incidente o si fue provocado.
Ulises Lara, vocero de la dependencia, declaró que peritos analizan la escena del percance para establecer si hubo o no “algún tipo de acelerador de incendio o fuegos de artificio”. En conferencia de prensa sostuvo que hasta el momento cuentan con “mucha información”, embargo falta recabar datos y evidencias para que se puedan determinar las causas del incendio.
“Regularmente este tipo de eventos son complicados porque se tiene que hacer toda la determinación de qué fue lo que originó. Ya hay algunas comunicaciones que dicen que tuvo un tipo de origen, cómo fue o si fue provocado o no. Todavía estamos en la fase inicial de recoger todos los elementos”, continuó.
Estableció que luego de que se fijen las condiciones que se presentaron, los estudios dictaminarán si fue accidental o provocado y “a partir de ello hacer las líneas correspondientes”, finalizó.