Ante las agresiones de las que fueron víctimas dos reporteros mientras trabajaban en un caso policiaco en calles del barrio Mineros, municipio de Chimalhuacán, el gobierno municipal indicó que los reporteros gráficos impedían las labores de la Fiscalía de Justicia.
A pesar de que ha evidencia de que los periodistas respetaron la línea establecida por la policía, el gobierno de Chimalhuacán aseguró que la policía activó el protocolo para resguardar la escena del crimen, debido a que ambos reporteros se negaron a identificarse.
En un comunicado el gobierno municipal desmiente una agresión física contra los fotógrafos, a pesar de que hay videos que muestran como David Deolarte de esta casa editora fue golpeado y tirado al piso donde continuaron los golpes.
Aseguró que en todo momento se resguardaron las garantías de las víctimas y familiares relacionados con el accidente.
Asimismo, el municipio de Chimalhuacán reafirmó la versión de que tras el acordonamiento de la zona, personal sin autorización y sin identificarse intentó ingresar por la fuerza al área de resguardo, impidiendo el trabajo que realizaba personal de la fiscalía estatal.
Detalló que detuvieron a una persona que portaba identificaciones vencidas de los diarios La Prensa y Reforma, que con insistencia intentaba tomar fotos de los lesionados, quienes solicitaron no ser fotografiados.
Especificó que la persona trasladada a las instalaciones de la Comandancia Municipal que se encuentra en el bbarrio Tlatel Mochiteco, donde posteriormente fue liberado sin presentar lesiones, ya que fue valorado por un médico legista y supervisado por personal de Derechos Humanos del Estado de México.