Feminicidio CDMX: exigen captura del feminicida durante funeral de Elvia Velázquez

Velan restos de víctima de feminicidio abandonada dentro de un tambo en Iztapalapa, su familia acusa lenta intervención de autoridades

Raúl Hernández | La Prensa

  · miércoles 5 de julio de 2023

Foto: José Melton | La Prensa

"Nos duele mucho decir como encontramos a mi hermana, hecha pedazos, le echó ácido porque quería borrar toda evidencia", dijo Esther, hermana de Carmen Elvia Velázquez, refiriéndose a Mario "N", el principal sospechoso de haber cometido el crimen y quien sigue prófugo, durante el velorio realizado en una funeraria en la alcaldía Venustiano Carranza.

El cuerpo de Carmen Elvia, de 48 años de edad, fue encontrado sin vida el pasado martes, 19 días después de que esta fue reportada como desaparecida. El hallazgo ocurrió en un predio ubicado en la colonia El Triángulo, en la alcaldía Iztapalapa, el cual se sabe que es propiedad del presunto feminicida, con el que sostenía una relación desde hacía aproximadamente 3 años y del hermano de este.

Ella estaba adentro de una bolsa, la cual fue introducida a un contenedor de plástico. Presentaba huellas de violencia extrema y le echaron cal encima. A decir de sus familiares, el olor a descomposición llamó la atención de los vecinos de la zona y estos dieron parte a las autoridades.

Foto: José Melton | La Prensa

Durante la tarde de este miércoles, la familia y amigos de Elvia, se reunieron en la funeraria García, ubicada en la colonia Emilio Carranza, sobre avenida Ferrocarril de Cintura, casi esquina con avenida Canal del Norte. En sus rostros se reflejaba ira e impotencia. Un niño de 3 años de edad era quien rompía el silencio mientras jugaban en el suelo.

Se ganaba la vida como comerciante y la última vez que se le vio fue el 15 de junio, en compañía de su pareja, de 32 años de edad. Se sospecha que este se la llevó a la fuerza con rumbo desconocido. Posteriormente, sus familiares la buscaron en el domicilio del sospechoso, ubicado en la calle Abedules, en la colonia Lomas de San Lorenzo, en Iztapalapa y dicen haber logrado entrar a una habitación en donde encontraron rastros de sangre.

Salvador Munguía, de 51 años de edad, exesposo de Elvia, con quien sostuvo una relación de pareja durante 24 años, durante la cual procrearon tres hijos, sabía que su actual pareja era una persona violenta, comentó que él sabía que en ocasiones presentaba golpes visibles. "Se pide justicia para Elvia, pero hay muchas Elvias, hay muchas familias que están sufriendo. Exijo que no quede impune el feminicidio de la madre de mis hijos", dijo con firmeza.

Los familiares comentaron que la ficha de desaparición de Mario "N", surgió después de que ellos comenzaron a buscar a la víctima. "Su mamá fue a reportarlo como desaparecido ante la Fiscalía, porque se le preguntaban sobre su paradero. Incluso una semana después de la desaparición de Elvia, su familia tuvo una fiesta y sabemos que él estuvo ahí", dijo una joven mujer, sobrina de la hoy occisa, quien exige que se emita una ficha de búsqueda y localización, en la que se le señale como presunto responsable del crimen.

Foto: José Melton | La Prensa


"A nosotros se nos paró la vida y ellos siguen la suya como si nada, cuando mi tía ya no pudo, cuando sus hijos ya no pueden. Tenemos un vacío en nosotros. Por investigaciones propias, sabíamos que su hermano y su papá estaban por aquí cerca trabajando, sabiendo que mataron a una mujer y están como si nada y las autoridades igual, porque no han hecho nada", dijo la sobrina enlutada, mostrando coraje.

Lo que se sabe hasta el momento es que el sospechoso pudo haber actuado en complicidad con alguna otra persona para trasladar el cadáver hasta el punto en donde fue localizado y que es muy probable que su familia lo esté encubriendo. Asimismo, se dio a conocer que cuenta con personas cercanas que radican en el estado de Michoacán, a donde probablemente huyó para ocultarse. Se espera que las autoridades pronto den con su paradero.

Síguenos en Facebook: La Prensa Oficial y en Twitter: @laprensaoem

Foto: José Melton | La Prensa