Al confirmar que el delito de extorsión en 2021 originó en la metrópoli 532 carpetas de investigación, mientras que el de fraude se posicionó con 18 mil 938, el presidente de la Comisión de Seguridad Ciudadana del Congreso de la Ciudad de México, Nazario Norberto Sánchez destacó que en la capital del país continúa de manera vigente la acción por parte de quienes llevan a cabo el delito denominado “gota a gota, para quienes promueve cárcel de 15 años.
Detalló que por lo que hace al 2022 las carpetas de investigación por extorsión fueron 357, lo que implica que disminuyó, pero el fraude ascendió a 21 mil 493 investigaciones.
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En lo que va del 2023, la extorsión se mantiene en 129 carpetas lo que representa un 36 por ciento del total de 2022 y 5 mil 606 por fraude, un 26 por ciento en comparación con el año pasado.
Resulta que el integrante de la bancada de Morena en el Poder Legislativo local, dentro de ese sentido, hizo un llamado a la Comisión de Administración y Procuración de Justicia del recinto de Donceles y Allende, para que dictamine a la brevedad su iniciativa que agrava las sanciones para quienes timen a las personas mediante intimidación o violencia.
Sostuvo que es preciso existan sanciones más severas contra los delitos de fraude y extorsión en préstamos usura conocidos como “gota a gota”, al tiempo que señaló que a últimas fechas se ha incrementado su comisión y que, según cálculos de expertos, dejan ganancias a los delincuentes de entre 10 y 50 millones de pesos mensuales.
El diputado morenista en entrevista mencionó que la Comisión de Administración y Procuración de Justicia, de una vez por todas, tiene que dictaminar el proyecto de decreto que al respecto presentó el pasado mes de mayo.
Comentó que en el documento se propone aumentar a 15 años de prisión las penas contra quienes utilizan la necesidad económica de las personas y las violentan hasta el punto de llegar al homicidio.
Para ese propósito se mostró a favor de adicionar un último párrafo al artículo 236 del Código Penal para la Ciudad de México, donde se establece que “al que obligue a otro a dar, hacer, dejar de hacer o tolerar algo, obteniendo un lucro para sí o para otro causando a alguien un perjuicio patrimonial, se le impondrán de cinco a diez años de prisión y de mil a dos mil unidades de medida y actualización”.
Abundó que, de igual forma, se establece que “las penas se incrementarán en una mitad cuando se utilice la coacción, intimidación, violencia física o verbal a otra persona, a fin de que ésta entregue una cantidad de dinero para sí o para interpósita persona, por concepto de préstamos de dinero e intereses, celebrados entre ambas partes de manera expresa, tácita o por escrito”.
Nazario Norberto detalló que, gracias a los trabajos de la Fiscalía General de Justicia (FGJ) capitalina, en conjunto con la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC), se han podido desmantelar células criminales y con ello, disminuyó la incidencia a más de 3.5 por ciento, sin embargo, la delincuencia idea nuevas formas de defraudar y extorsionar a las personas.
Delineó que el modus operandi de los delincuentes que practican el “gota a gota”, surgió en Colombia y en la Ciudad de México consiste en enganchar a la gente al ofrecer préstamos de entre dos mil y 60 mil pesos en menos de dos horas, sin fiadores, ni garantías y con supuestas cuotas mínimas de intereses de hasta un 20 por ciento, con el único requisito de que tengan un comercio y credencial de elector.
Una vez aceptado el crédito, los cobradores acuden todos los días en motocicletas a los domicilios de la víctima para recaudar el pago, sin embargo, si el deudor se atrasa, le imponen intereses excesivos y lo comienzan a amenazar, robar o lesionar, aclaró.
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