Un grupo especial de investigadores de la FGJCDMX realizaron operativos y cateos en un edificio en la colonia Buenavista en Cuauhtémoc, donde encontraron evidencias importantes para el esclarecimiento del crimen de las dos amigas venezolanas asesinadas y quemadas en una zona boscosa del pueblo de Topilejo en la Alcaldía Tlalpan. Un segundo cateo se llevó a cabo en un departamento en La Providencia en Azcapotzalco.
Hasta ahora, todo parece indicar que Stephany y Susej fueron ultimadas por gente ligada a la delincuencia organiza[1]da dedicada a la trata de personas que operan en la zona de Sullivan.
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El primer operativo y cateo fue realizado en un edificio localizado en Juan Aldama y Pedro Moreno, Colonia Buenavista, Alcaldía Cuauhtémoc, el cual era utilizado por presuntos tratantes de personas donde se supone estuvieron las dos amigas venezolanas asesinadas, quemadas y abandonadas en un paraje de la zona boscosa de Topilejo en Tlalpan.
Se trata de un inmueble que consta de 83 cuartos donde los tratantes de personas, presuntamente les rentan a las mujeres que trabajan para ellos en la zona de Sullivan y a quienes, tras enganchar, las obligan a pagar cantidades importantes de dinero que luego se convierten en fuertes deudas que tienen que pagar o de lo contrario las golpean y a las extranjeras, les retienen sus documentos personales para que no puedan salir del país.
De acuerdo a las investigaciones de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México, se presume que en ese lugar estuvieron las amigas venezolanas Stephany y Susej y de ahí las saca[1]ron para llevarlas a un paraje del pueblo de Topilejo en Tlalpan, donde tras ser golpeadas y asesinadas a balazos, las quemaron para tratar de borrar evidencias físicas y no ser identificadas; sin embargo, la fiscalía capitalina avanza en las indagatorias.
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