TLALNEPANTLA, Méx., 17 de Febrero.- Raúl era un hombre trabajador, a quien le gustaba su empleo como cajero de una tienda Oxxo, el pasado lunes un par de delincuentes truncaron sus sueños y sus aspiraciones de superarse y ser alguien más en la vida, cuando lo asesinaron a balazos debido a que se opuso a que le robaran el dinero de la venta del día.
Mientras que el desafortunado cajero cayó casi instantáneamente muerto, ante la mirada atónita de sus compañeros de trabajo, los presuntos homicidas salieron corriendo de la tienda para darse a la fuga y aunque no consumaron el asalto si le robaran la vida.
Eran como las seis de la tarde del pasado lunes, Raúl se encontraba como todos los días trabajando como cajero en una tienda Oxxo, ubicada en la esquina de la calle de Fresnos y Ciprés, en la colonia Tabla Honda, en este municipio, cuando el destino le jugó una mala jugada y decidió su suerte.
Dos sujetos que habían entrado a la tienda como cualquier otro cliente, al llegar a la caja sorpresivamente sacaron de entre sus ropas una pistola y bajo amenazas de muerte le ordenaron que les entregara todo el dinero de la venta del día.
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Sin embargo, como Raúl se negó, uno de los delincuentes de manera violenta le grito: “no te lo voy a repetir otra vez, dame todo el dinero que tienes en la caja o te voy a matar”, Raúl se volvió a negar y fue entonces que el presunto ladrón lo asesinó a quemarropa de varios balazos.
“Te lo dije cabrón”, le grito el delincuente al desafortunado cajero y enseguida pistola en mano, ante la mirada atónita de los compañeros del occiso salió corriendo junto con su cómplice para darse a la fuga y perderse entre las calles del lugar.
Compañeros del cajero al darse cuenta que su estado de salud era delicado y que agonizaba de inmediato pidieron el auxilio de una ambulancia para que recibiera atención médica; aunque cuando paramédicos de la Cruz Roja llegaron ya era demasiado tarde, pues ya había muerto.
Al tener conocimiento de los hechos, elementos de la policía municipal que siguen brillando por su ausencia y que de alguna manera son responsables de la inseguridad que se vive en este municipio por su incapacidad para actuar y brindar seguridad a los ciudadanos, se presentaron en el lugar y al confirmar la muerte del cajero acordonaron toda la zona y pidieron la intervención del Ministerio Público para que diera fe de los hechos, al tiempo que desplegaron un fuerte operativo en toda la zona para ubicar y detener a los criminales, pero como regularmente sucede en estos caso no tuvieron suerte, pues escaparon sin dejar pistas de su paradero.
Al tener conocimiento de los hechos, en medio de la gran cantidad de curiosos que se congregaron en el lugar, el agente del Ministerio Público se presentó en la tienda, donde una vez que realizó las diligencias ministeriales y ordenó el levantamiento del cadáver dio inicio a la carpeta de investigación correspondiente por el delito de homicidio.
“Eran dos sujetos como de entre 25 y 30 años, delgados, de estatura mediana”, fue la referencia que compañeros del occiso dieron a elementos de la policía ministerial de los presuntos homicidas, a quienes exigieron tenían que buscar, detener y poner tras las rejas porque afirmaban el asesinato de Raúl no debe de quedar impune, más cuando era un hombre bueno y trabajador que no se metía con nadie y quien no merecía morir de esa forma, menos cuando a un par de delincuentes se les antojo.
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