Se prevé que, con el regreso a la nueva normalidad, las organizaciones criminales volverán a operar al 100%, alertó el Consejo Nacional de Seguridad Privada (CNSP).
Adelantó una posible alza en los delitos de robo a casa habitación y a comercio, esto debido a la destrucción de los sistemas de alarmas vecinales análogas en la ciudad de México.
No es la única mala noticia, desafortunadamente la capital del país transita por un momento complicado, dijo Raúl Sapién Santos, presidente del CNSP, al reconocer que en algunas zonas hay una alta percepción de inseguridad, ya que por el confinamiento y la falta de afluencia se incrementó la población de indigentes.
De acuerdo a datos proporcionados por la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) de la CDMX, el programa Alarmas Vecinales dejó de funcionar en días pasados derivado de la obsolescencia de la tecnología, principalmente.
En tanto, el número de alarmas canceladas en las 16 alcaldías se estima en 257 mil pues estas fueron sustituidas por Mi Calle, una iniciativa que se integra a la App CDMX, la cual cuenta con un botón de pánico digital, sin embargo, señaló existen zonas que podrían quedar a merced de la delincuencia como Milpa Alta, Magdalena Contreras, Tláhuac y toda la zona del Ajusco donde no se cuenta con una cobertura adecuada.
Estadísticas del Observatorio Nacional Ciudadano mostraron un crecimiento importante del robo a negocio en la CDMX durante el segundo trimestre del año, tan solo en el mes de abril registró 1,119 casos, mayo aumentó a 1,134 y junio cerró con 1,158, indicadores nada satisfactorios pues, aunado al rezago económico y al aumento del desempleo, se propiciaría el cierre de muchos comercios que además están teniendo problemas financieros.
Este aumento en la inseguridad no sólo afectará a las grandes empresas ni a las cadenas de autoservicio más reconocidas, también al negocio común: estéticas, lavanderías, farmacias y tiendas de abarrotes, detalló.
“Otro foco rojo que se suma al problema de la desarticulación de las alarmas es el delito de la extorsión en los comercios. Este tipo de actividad criminal, que conlleva aspectos de corrupción, mata la economía y el surgimiento de nuevos emprendedores”, señaló el experto en seguridad.
Ante este panorama, dijo la decisión de intempestivamente suprimir las alarmas vecinales coloca en un área vulnerable a la ciudadanía de las 16 alcaldías, que tendrán que recurrir a nuevos métodos de seguridad para salvaguardar su integridad física y su patrimonio.
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