La Prensa en Línea
NUEVA YORK, N.Y., 27 de noviembre (Notimex).- Miguel ÁngelMartínez, un narcotraficante mexicano conocido por el alias de“El Tololoche”, incriminó hoy a Joaquín “El Chapo”Guzmán en una amplia serie de actividades criminales que legeneraron cuantiosas ganancias, durante los primeros años de ladécada de 1990.
En el marco del juicio contra Guzmán que se realiza en NuevaYork, Martínez testificó ante la corte que bajo las órdenesdirectas del acusado él almacenó e importó varias toneladas decocaína hacia Estados Unidos bajos numerosos métodos.
El testigo, que se encuentra en libertad gracias a un acuerdo decooperación con el gobierno de Estados Unidos, refirió comoejemplo de las crecientes ganancias de Guzmán por el tráfico dedrogas, la compra de cuatro jets a principios de la década de1990.
En este época, agregó, Guzmán recibía desde Tijuana jets quecontenían el dinero en efectivo generado por la venta de drogas enla ciudad de Los Ángeles.
“Al principio se recibían tres, cuatro, cinco millones dedólares por mes, y aumentó hasta 20 millones de dólares”, dijoMartínez, cuyo rostro no puede ser difundido ni en los bosquejosde la corte.
Los métodos de envío de cocaína a Estados Unidos erantúneles, vehículos con doble fondo y más tarde latas de chilesjalapeños y trenes, indicó el testimonio.
Destacó Martínez, que ese fue el auge del Cártel de Sinaloa.En consecuencia, aceptó que introdujo "muchísimo" dinero alsistema bancario, pues sobornaba a los empleados de lasinstituciones financieras.
Con sus ganancias, manifestó el testigo, Guzmán “teníapropiedades en todos lados en México, en todas las playas, asícomo ranchos y bodegas”. Asimismo, dijo que viajaron “a todo elmundo” por vacaciones y por negocios, es decir, para buscarnuevos proveedores o clientes.
En específico, Martínez rememoró la compra de una casa enAcapulco de 10 millones de dólares, que incluía un yate que fuenombrado “Chapito”, así como un rancho con zoológico enGuadalajara.
El rancho, con tigres, leones, panteras y venados, era de taltamaño que incluso se requería un tren interno para desplazar alos visitantes.
Martínez, quien se describió como “gerente” de Guzmánentre 1987 y 1993, cuando arrestaron al acusado por primera vez,también señaló que realizó pagos a proveedores de cocaína deColombia y se encargó de “lavar” dinero al introducirlo alsistema bancario.
A diferencia del primer testigo colaborador con la fiscalía,Jesús “El Rey” Zambada, quien refirió acciones de Guzmán delo que dijo haber escuchado de su hermano “El Mayo” Zambada,Martínez admitió que laboró de manera estrecha con Guzmán poral menos seis años.
Sus testimonios siempre se referían a conversaciones directasque mantuvo con Guzmán o a decisiones que él mismo tomó, siemprebajo las supuestas órdenes del acusado.
Así, el Cártel de Sinaloa importó a Estados Unidos entre 1987y 1990 entre 25 y 30 toneladas de drogas al año por un túnelubicado entre Agua Prieta y Arizona. Esto generó ingresos por unos500 millones de dólares, 45% de los cuales era de Guzmán.
Martínez expresó que él, personalmente estuvo a cargo deimportar “más de 150 toneladas” de cocaína de 1987 a 1993.Todo porque “el señor Guzmán me lo indicó”, señaló eltestigo.
Según el testimonio, Guzmán supuestamente ordenó alarquitecto Felipe Corona la construcción de “clavos” o sitiosocultos para guardar droga en casas privadas, así como de unsegundo túnel, en Tijuana.
Síguenos en Facebook: La PrensaOficial y en Twitter: @laprensaoem