TLALNEPANTLA, Méx., 27 de Mayo.- Una antigüedad de más de 30 años tiene “El Barrigón”, el bar de donde el presunto feminicida serial, Andrés “N”, sacó algunas de sus víctimas para asesinarlas.
Según versiones de algunos de los empleados, dicho bar inició sus funciones como una cantina, donde los principales clientes eran hombres.
Sin embargo, con el paso del tiempo se convirtió en bar y fue considerado como uno de los más conocidos en el centro de Tlalnepantla, pues el ambiente que se vivía era muy ameno y se convirtió en una buena fuente de empleo para meseros y meseras, ya que comenzaron a llegar mujeres que amenizaban el ambiente y la estancia de los clientes, mismos que día con día se congregaban en el lugar en gran cantidad.
A pesar de que se dicen muchas cosas de “El Barrigón”, la realidad es que, según testimonio de algunos clientes, el lugar es sumamente tranquilo y seguro, los clientes van a lo que van, no buscan problemas y se dedican a “vivir el momento, a tomar, bailar y convivir con las “damas de compañía”.
Sus principales clientes son comerciantes de la zona centro de Tlalnepantla, la mayoría de ellos hombres de 35 años de edad para adelante, quienes después de una ardua jornada de trabajo, llegan para “desestresarse”, tomar una copa, convivir con alguna de las mujeres y bailar.
Aunque también llegan hombres de la tercera edad que se toman unas copas, conviven con ellas, bailan, y si tienen suerte, la convencen a que los acompañen a cambio de una cantidad de dinero como sucedía con Andrés “N”, quien por cierto era considerado como uno de los clientes más antiguos del Barrigón.
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Sin embargo, en torno a esta situación, personal del Barrigón que se vio impactado por los asesinatos que presuntamente cometió Andrés “N” contra algunas de las chicas que trabajaron en el lugar, señalaron que la seguridad y el buen funcionamiento dentro del bar es su obligación, pero, indicaron, cuando alguna de ellas toma la decisión de irse con alguno de los clientes es bajo su responsabilidad, ahí en esa decisión termina la responsabilidad de ellos y no son responsables de lo que les pueda pasar, pues es una situación que esta fuera de su alcance.
Lo que es bonito y es lo que todos los días se da en el Barrigón, dijeron, es que la gente venga, deguste unas copas, conviva con las chicas, sin pleitos y convertía el escenario en una pista de baile, donde todo es alegría, felicidad y buen convivió.
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