Con más de 21 metros de profundidad y 1.3 kilómetros de largo fue hallado en la frontera entre Tijuana, Baja California, México con San Diego, California, EU, el narcotúnel más largo que fue utilizado para traficar droga.
La Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos informó que el túnel incluye un extenso sistema de rieles, ventilación forzada, cables y paneles eléctricos de alta tensión, un elevador en la entrada y un complejo sistema de alcantarillado.
Si bien los túneles subterráneos no son algo nuevo, la sofisticación y longitud que cuenta éste, demuestra las arduas labores que las organizaciones criminales transnacionales emprenden para facilitar el contrabando
Cardell T. Morant, agente especial interino a cargo de las investigaciones de Seguridad Nacional en San Diego
Tras varios meses de investigación, la Fiscalía General de la República y agentes de combate de túneles transfronterizos de EU lograron identificar la entrada del túnel.
“El túnel fue hallado en agosto de 2019, por lo que se inició con el mapeo del área para conocer el alcance de la construcción.”
Al dar con el túnel, los agentes informaron que la construcción tiene uno 1.68 metros de altura, 0.61 metros de ancho y una profundidad de 21.3 metros, además de que encontraron cientos de sacos de arena que bloqueaba la supuesta salida del túnel en un almacén del distrito de Otay Mesa, en EU.
El ex líder del cártel de Sinaloa, Joaquín Guzmán Loera fue el pionero en la construcción y uso de narcotúneles, para transportar mercancía y usarlos como rutas de escape, pues hay que recordar que “El Chapo” logró su última fuga gracias a un túnel, cuando estuvo preso en el penal de máxima seguridad del Altiplano, Estado de México.
Con información de AP