Un disparo en la cara fue suficiente para que un hombre, de aproximadamente 35 año de edad, fuera privado de la vida en un patio de maniobras de camiones pesados de la Central de Abasto, en Iztapalapa, el o los responsables, escaparon.

De acuerdo con los primeros reportes, Marcos, como fue identificado en el lugar por su hermano, se encontraba en el patio de descarga O, cuando fue sorprendido por dos sujetos a bordo de una motocicleta con quienes discutió apenas unos minutos y después le dispararon.

Testigos señalaron que mientras el carretillero cayó malherido al suelo, los sujetos abordaron la motocicleta y escaparon del lugar, por lo que policías de investigación ya revisan las cámaras de vigilancia del lugar en busca de datos que permita la captura de los probables responsables.

Minutos más tarde, paramédicos acudieron al lugar y tras valorar a Marcos, determinaron que el disparo que presentaba en la cabeza le había arrebatado la existencia en apenas unos minutos, por lo que nada pudieron hacer por el desafortunado sujeto.

Policías auxiliares encargados de la vigilancia de la Central de Abasto, acordonaron el lugar y colocaron mamparas para evitar que curiosos se acercaran a la escena del crimen y dieron aviso al agente del Ministerio Público, para que diera inicio a la carpeta de investigación por el delito de homicidio doloso por disparo de arma de fuego.

Poco más de dos horas después de cometido el crimen, peritos de la Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México, se presentaron en el lugar para iniciar las indagatorias y trasladar el cadáver al anfiteatro correspondiente para las pruebas de rigor.

EGS