NOEL F. ALVARADO
La habitación 420 de un hotel de la Colonia Doctores fue escenario del presunto suicidio de un hombre, el cual fue hallado con una serie de lesiones ocasionadas con un cúter con el que se supone se ocasionó las heridas que le provocaron la muerte.
Durante las primeras investigaciones de la policía encontraron sobre el tocador abajo la pantalla y frente a la cama, una nota con la leyenda “Perdóname Familia Ricardo” y sobre el buró de lado izquierdo de la cama se halló un cúter de color amarillo de aproximadamente 20 centímetros con manchas hemáticas y botellas de bebidas alcohólicas.
De acuerdo a las primeras investigaciones de la policía, Ricardo “N”, de entre 60 y 63 años de edad llegó al hotel y pidió una habitación. Al vencerse el plazo, los trabajadores del hotel tocaron la puerta para informarle que debería abandonar la habitación y, debido a que nadie recibía respuesta, optaron por abrir la puerta.
Grande sorpresa se llevaron cuando descubrieron el cuerpo ensangrentado de Ricardo. Los testigos de inmediato pidieron la intervención de personal de los cuerpos de socorro y de la policía.
Al lugar arribaron los paramédicos de la unidad 01de Urgencias Básicas, quienes tras revisar el cuerpo de este hombre diagnosticaron que ya había dejado de existir a consecuencia de las múltiples lesiones que presentaba en diferentes partes del cuerpo, por lo que se pidió la intervención de autoridades ministeriales y periciales.
Una vez que los peritos y el Ministerio Público recogieron toda evidencia que los lleve al esclarecimiento de la muerte de este hombre, el cuerpo fue trasladado al anfiteatro de la fiscalía de homicidios donde se continúa con las pesquisas.
Todas las evidencias encontraran en el lugar indican que la muerte de Ricardo “N” se debe a un suicidio; sin embargo, las indagaciones continúan a fin de aclarar este homicidio.