El aumento de la violencia y el avance de la pandemia han provocado que el gobierno de El Salvador endurezca el castigo contra las pandillas, luego de que el presidente de esa nación, Nayib Bukele, autorizara el uso letal por parte de sus cuerpos de seguridad, además de cero tolerancias contra las pandillas al interior de las cárceles salvadoreñas.
A través de su cuenta de Twitter el mandatario centroamericano anunció la autorización del uso de la fuerza letal en defensa propia y la de los salvadoreños. Esta medida fue tomada luego del fin de semana violento que dejó al menos 50 homicidios, violencia que autoridades salvadoreñas atribuyen a “las maras”.
El mandatario agregó que su gobierno respaldara legalmente a quien sea “injustamente juzgado, por defender la vida de la gente honrada”. Aunado a esta medida, los siete penales de alta seguridad fueron decretados zona de emergencia, por lo que al interior los reos integrantes de pandillas rivales fueron mezclados.
Las imágenes que circularon por el mundo dividieron opiniones, pues además del hacinamiento que incumple las medidas sanitarias dispuestas por la OMS, los reos “no van a ver ningún rayo del sol” según informó Osiris Luna, director de los centros penitenciarios de El Salvador.
Bukele informó que el país cuenta ya con 345 casos confirmados, de los cuales 97 ya se recuperaron, mientras que hay 8 fallecidos. Las disposiciones sanitarias son más estrictas luego de que durante el fin de semana se registraran al menos 25 casos de covid-19 los cuales habrían sido “contagios locales”.