La postura adoptada por el gobierno de Suecia para enfrentar a la pandemia “podría mejorarse”, así lo expresó su estratega Anders Tegnell, autoridad sanitaria del país nórdico, que hasta este miércoles sumaba 4 542 muertes, cifra realmente preocupante si se compara con los poco más de 500 muertos sumados entre sus naciones vecinas de Noruega y Finlandia.
A través de una entrevista transmitida por una estación de radio pública en Suecia, el epidemiólogo del Instituto de Salud Pública reconoció que su estrategia para evitar la propagación del coronavirus dejó muchos muertos.
“Si nos encontrásemos con la misma enfermedad y con el mismo conocimiento que tenemos hoy, creo que nuestra respuesta caería en algún punto intermedio entre lo que hizo Suecia y lo que ha hecho el resto del mundo” expresó Tegnell durante la entrevista radiofónica.
Estas declaraciones del epidemiólogo son las primeras en las que cuestiona su estrategia del “llamado voluntario” al confinamiento, la cual defendió pese a que fue criticada en todo momento, hasta el día de hoy que refirió “Claramente, hay un margen de mejora en lo que hemos hecho en Suecia”.
Pese a lo anterior y a los casi 50 mil casos confirmado, Tengell dijo no estar seguro de que la introducción de medidas más severas hubieran mostrado una diferencia considerable.
Las autoridades siguen defendiendo su modelo “light” argumentando que sus medidas fueron pertinentes a largo plazo, respaldándose en la idea de que esta lucha contra el virus “es un maratón y no un sprint”
Tangell junto con el gobierno que encabeza Stefan Lofven optaron desde el inicio de la pandemia por mantener actividades escolares presenciales para niños menores de 16 años, además de que solo quedó en una recomendación el llamado a distanciamiento social al interior de cafés, bares y empresas, que siguieron con actividades pese a la emergencia.
En medio de las alarmantes cifras y las fuertes críticas recibidas, las autoridades suecas alentaron a la población a trabajar desde casa, así como el constante lavado de mano y limitar el contacto físico, así como la prohibición de las concentraciones de más de 50 personas, única medida que adoptó ese gobierno desde el inicio de la pandemia.
Con información y fotos de AFP