El secretario de Salud, Jorge Carlos Alcocer Varela reconoció que en México, el modelo de cobertura universal vía el aseguramiento ha fracasado y cerca de 20 millones de mexicanos no tienen acceso a los servicios de salud.
El acceso a los servicios requeridos se ve limitado por diversas razones. El seguro popular sólo ampara el paquete de servicios que representa un 20 por ciento de aquellos que prestan los institutos de seguridad social.
Tampoco se han ampliado los recursos humanos y materiales para satisfacer el crecimiento de la demanda. Y en ninguno de los subsistemas público de servicios con el resultado de sobrecarga seria en los servicios que redundan y en poca posibilidad de intercambiar servicios entre las instituciones públicas.
Durante su comparecencia ante la Comisión de Salud del Senado de la República, el encargado de la política de salud comentó que ante la creciente “irritación social” con el sector público, de salud, y los graves problemas laborales del ramo, la secretaría a su cargo tiene tres objetivos principales para cumplir en los próximos años.
El titular de Salud resaltó que el Sistema Nacional de Salud es segmentado, pero tiene como fortaleza. En un día normal la Secretaría de Salud y IMSS juntos dan 830 mil consultas, atiende 80 mil urgencias, realizan 7 mil 500 cirugías, atiende 3 mil 500 partos y egresan de sus hospitales 12 mil pacientes, sin embargo, hoy sufren grandes problemas reclamados por ciudadanos y trabajadores y seguidos por ustedes también desde su trinchera.
Se pronunció por hacer efectivo el artículo cuarto constitucional, fortalecer la rectoría protección sanitaria y fortalecer la capacidad para terminar con inequidades en salud.
Reconoció que si bien han tenido “algunos rezagos” en materia de abasto de medicamentos, para finales de este año se tiene pendiente el suministro de menos de 50 medicamentos que se están comprando en forma directa.
A la reunión también se dieron cita representantes de los padres de niños con cáncer.
Es necesario hacer efectivo el artículo 4 constitucional y garantizar el acceso efectivo universal y gratuito de todos los mexicanos a los servicios de salud bajo los principios de participación social, competencia técnica, calidad médica, trato digno y humanismo, recalcó.
“Con prioridad para la población sin seguridad social laboral y en particular aquella de alta y muy alta marginación, y desde luego la de los pueblos originarios”, indicó.
Consideró que se requiere fortalecer la capacidad del sistema de salud con la perspectiva de disminuir las inequidades e implantar un modelo de atención de salud centrado en la comunidad, en la familia, en las personas, con énfasis en la educación y promoción de la salud, la detección oportuna de enfermedades y riesgos a la población con la participación de todos los sectores involucrados.
El funcionario del Gobierno federal puntualizó distintas problemáticas relacionados con el acceso y la calidad de los servicios de salud.
"Este conjunto de elementos ha resultado en una creciente irritación social con el sector público de salud y en una conflictiva laboral insólita que plantean nuevos objetivos para los próximos años", indicó.
Dijo que se requiere fortalecer la rectoría y regulación sanitaria a fin de proteger a la población contra riesgos sanitarios y garantizar el acceso a medicamentos y vacunas seguras para toda la población.
Asimismo, las enfermedades no crónicas, no transmisibles, en particular la diabetes, las enfermedades cardiovasculares, el cáncer, han crecido rápidamente y a ello se suman las muertes por violencia de hombre y mujeres jóvenes y en edad productiva.
Refirió que en el IMSS vio mermados sus ingresos al sustituir la cuota, patronal, proporcional por una cuota fija; a pesar de que la aportación del Estado se incrementó en 5 al 30 por ciento del total de sus ingresos.
JLP