En México urge promover y alentar el trabajo de miles de mujeres científicas e investigadoras que a diario realizan proyectos para mejorar la vida y proteger el medio ambiente, pero por la falta de apoyos e inversión, sus investigaciones se quedan en los escritorios.
Para dar visibilidad a las mujeres en el ámbito de la ciencia, "hace 4 años surgió 25 Mujeres en la Ciencia, a raíz de la pandemia por el Covid-19, que cierra brechas de género en temas de ciencia, ya que en los dos próximos años se van a crear más de 100 millones de diferentes tipos de profesiones o trabajos relacionados con las carreras de Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas (STEM, por sus siglas en inglés), afirmó Adriana Rius, directora de marca y comunicación 3M Américas.
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De acuerdo con la OCDE, las carreras de Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas son las que predominarán en el mercado laboral para el 2030.
Pero a la fecha, sólo 3 de cada 10 profesionales son mujeres. "Las mujeres son las que tienen que cerrar esta brecha en el área de ciencia y tecnología".
En la premiación de 25 Mujeres en la Ciencia, sustentabilidad Ambiental, organizado por la empresa 3M, las organizadoras resaltaron que las mujeres representan casi la mitad de la población y constituyen apenas el 28% de los investigadores científicos en todo el mundo.
La empresa promueve la inclusión y romper los estereotipos relacionados con la brecha de género en el ámbito científico, por ello, insistió la directiva, 3M decidió crear la iniciativa de “25 Mujeres en la Ciencia Latinoamérica”, la cual busca dar visibilidad aquellas mujeres científicas que están generando un impacto positivo en toda la región, y que a través de sus proyectos e historias, pueden inspirar a las nuevas generaciones de niñas y mujeres en su sueño de ser científicas.
En la 4ta Edición del premio, realizado en un huerto de la Colonia Hipódromo Condesa, se informó que el 85% de los trabajos que habrá antes de finalizar esta década aún no se han inventado, por lo que será necesario impulsar entre las generaciones más jóvenes el estudio de estas disciplinas científicas.
Entre las ganadoras se encuentran biólogas, químicas, físicas, metalúrgicas, con maestrías y doctorados.
Con el tema de la sustentabilidad ambiental busca generar conciencia en la sociedad, ya que 44% de los mexicanos reconocen que el cambio climático está afectando a sus comunidades, de acuerdo con el informe State of Science Insights 2024, una encuesta que realiza 3M por séptimo año consecutivo para conocer las percepciones globales de la ciencia.
Presentan proyecto para sustituir el glifosato
Angélica del Carmen Ruiz Font, presentó el proyecto TALARIA Bioherbicida es una herramienta ambiental para el control de malezas, es una fórmula biológica patentada que sustituye al mortal glifosato, es una garantía para eliminar agrotóxicos de los suelos y los alimentos.
Glifosato -que el gobierno prohibió pero ante la falta de otro herbicida para sustituirlo continuará utilizándose- sólo que ninguna dependencia pública ha volteado a ver su investigación, Consejo Nacional de Humanidades, Ciencias y Tecnologías (Conahcyt).
La académica en entrevista lamentó que se anden buscando alternativas en el extranjero, si aquí hay investigadores que hay buscando alternativas para herbicidas naturales que no dañen el suelo. El proyecto lo inició en el 2016 con estudiantes de maestría, donde encontró microbios de semillas que matan y se enfocó en una tesis de maestría.
La científica que tiene una alternativa contra el glifosato es a partir de una bacteria, se pronunció porque las instituciones, gobierno federal o empresarios, proporcionen recursos para producirlo. Se necesitan 600 mil dólares para tener un producto terminado que pueda alcanzar un nivel comercial.
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Científicas mexicanas ganadoras
Berenice Balderas dio origen a una metodología para la evaluación de compuestos orgánicos volátiles en miel de abejas y así caracterizar una huella eco metabólico de sitios impactados por plaguicidas.
Liliana Romero Reséndiz, creó AIHA el nuevo material antimicrobiano patentando que transforma los espacios públicos, médicos, de transporte y alimentarios en un escudo contra virus y bacterias. Hasta seis veces más fuerte y durable que el acero convencional, vuelve la tecnología más ligera y ecológica, reduciendo las emisiones de gases contaminantes y haciendo espacios más seguros.
Karime Guillén Libien, creó Rearvora para dar nueva vida a los residuos orgánicos a través de la revaloración y reciclaje de desechos orgánicos en productos de cuidado personal realizados con innovación biotecnológica para impulsar cambios significativos en la industria.
Ibeth Cortés Ángeles, utilizó de semillas como el maíz criollo y a partir de estas producir forraje verde hidropónico. La innovación va encaminada a sustituir nutrientes inorgánicos a orgánicos, disminuyendo el impacto ambiental, cambiando sistemas de riego amigables, y que el ganado provea mejor calidad de proteína y grasas. Estos son algunas de las 25 científicas ganadoras.
Nuestro país es una de las naciones con mayor participación y se reconocieron a ocho científicas y sus proyectos nacidos en el país.
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