“Oh Jesús Malverde milagroso, tú que moriste pobre, concédeme este favor, y llena mi alma de gozo”, así inician su oración algunos devotos potosinos, quienes postrados frente a la imagen controversial de Jesús Malverde, pidieron de nueva cuenta por su salud, bienestar y por supuesto que los aleje del virus Covid-19.
Jesús Malverde Campos, personaje originario del Estado de Sinaloa, hoy día se ha convertido en una de las figuras “religiosas” más idolatradas, donde muchas personas devotas a su imagen acuden a él para pedir consuelo y ayuda ante grandes desesperaciones, mismas que dicen les ha cumplido inmensos milagros.
Este domingo 3 de mayo, muchos de las y los individuos que le rinden culto a Jesús Malverde, celebraron desde sus hogares el CXI aniversario luctuoso de esta figura tan particular, donde llenaron de flores, veladoras, regalos, cervezas, cigarros y hasta botellas de alcohol, el pequeño espacio destinado al espíritu de a quien ellos también llaman “El patrón y Justiciero”.
Ello, debido al aislamiento dispuesto por las autoridades. Esta contingencia de igual forma no les permitirá viajar para visitar la icónica Capilla de Malverde en la ciudad de Culiacán, donde desde hace más de 30 años se venera a este “santo” impuesto por la comunidad malverdiana.
La infinita devoción que le tienen sus seguidores, puede resultar abrumadora para muchos, pero la desigualdad social, la violencia y la cultura del narcotráfico, son sin duda, algunos de los factores, del por qué una pequeña parte de la población muestra tanto fervor a su imagen, muchos de ellos mencionan sentirse desprotegidos y dicen que “Malverde es quien siempre les ha tendido la mano”.
Saúl Dávila, quien es integrante de una agrupación de música de banda, su cariño y veneración hacia Jesús Malverde, no nada más tiene qué ver con las penurias que ha enfrentado en su vida, sino también tiene conexión con la fortaleza espiritual que le ha brindado, desde ya hace muchos años su fe Malverdiana.
“Estamos pasando por situaciones muy difíciles, hay gente que necesita más que otras, hay quienes se están quedando sin trabajo, por ejemplo muchos dicen que lo que está pasando es para generar miedo, en fin sólo Dios sabe qué está ocurriendo en realidad. “Yo siempre acudo al gran Malverde, hago oración por la gente necesitada que está pasando por peores momentos y quienes están perdiendo a sus seres queridos”.
Nuestro patrón Jesús Malverde nos colma, agregó, de bendiciones, como de salud y paciencia para salir de todo esto, él protege a sus seguidores con su infinita misericordia.
También, no se hicieron esperar las llamadas “serenatas”, donde pequeñas agrupaciones familiares, se reunieron en sus hogares, para cantarle letras que enaltecen los milagros y favores realizados, a quien señalan como “gran jefe”.
Impresionante la pasión que conlleva el fervor hacia esta figura, muchas familias que residen en la capital le veneran también porque, al verse desplazados de su lugar de origen por la violencia, señalan que, “El buen Malverde” los cuidó y protegió para llegar hasta esta entidad, donde ahora pueden vivir tranquilos.
Así lo mencionó Yatziri Campos, de 25 años de edad, originaria de Guadalupe, Nuevo León, quien además agregó, “ahora sí que como dice la canción, él es el santo de los pobres, y está a la orden con muchas peticiones, unas son anónimas y otras tienen nombre”.
EG