Ciudad de México.- El sector industrial del Estado de México expresó su desacuerdo con la iniciativa que presentaron diputados de la entidad para prohibir la venta de comida chatarra a niños, pues indicaron que los legisladores están tomando muy a la ligera ese asunto, sin analizar de manera integral el brutal y letal impacto que tendrá en la economía y en los empleos.
Tal aseguró el dirigente de la unión industrial de la entidad, Francisco Cuevas, quien advirtió que toda la cadena de latas, acero, etiquetado, tintas, aluminio, vidrio, cartón, productores de azúcar y endulzantes, además de las embotelladoras y los fabricantes de botanas estarán en el abismo.
Cuestionado sobre su postura sobre este tema, dijo que es cierto que el país padece una epidemia de obesidad, pero propuso mejorar al etiquetado, reducir porciones y gradualmente modificar las fórmulas para que los productos sean más saludables, antes de llevar a la economía a una mayor destrucción que la causada por la pandemia.
Tras puntualizar que al menos cuatro sectores de la industria resultarían con serios años ante esta iniciativa, hizo énfasis en que sí es necesario modificar el etiquetado de los productos para que la gente pueda entender el contenido de sal, azúcares, harinas refinadas y grasas saturadas, con el fin de que se tome la mejor decisión.
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“Si se afectara sólo al sector de empresas que se dedican a producir botanas, jugos o refrescos, finalmente, si todo quedara ahí, sería grave, pero además se están afectando una gran cantidad de industrias”, apuntó, luego de advertir que existe toda una cadena de producción que da miles de empleos.
Mencionó que también habría un severo impacto en las “tienditas de la esquina”, que están conformadas por gente que con mucho tiempo y esfuerzo han puesto ese negocio, y al vender mucho menos de botanas o de bebidas embotelladas podrían llegar hasta la quiebra.
“Pensamos que puede haber un desempleo brutal si se ataca esas ramas de la economía, y aparte de eso, es que se hace en el peor momento, porque estamos en plena pandemia y no es momento de castigar a la empresa, sino de ayudarlas y con estas medidas se está haciendo justo lo contrario”, acusó Cuevas.
Pidió a los diputados locales reconsiderar la medida, y pensar en otras alternativas como el etiquetado. “Toda la economía de nuestro país está siendo golpeada de una manera impresionante por los efectos de la pandemia, los datos en el desempleo lo demuestran. Creemos que es el peor momento para tratar de prohibir productos industrializados; primero empezamos con los plásticos y ahora con las bebidas embotelladas y botanas. Siempre habrá algún argumento para pensar en los efectos negativos de cualquier industria.
Finalmente, expresó que los industriales comparten la preocupación de los diputados locales, “pero estamos seguros que las prohibiciones nunca conducen a nada positivo. Tenemos disposición de trabajar de manera conjunta para resolver ese y otros problemas que aquejan a la población”.
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