Los odontólogos clínicos son el grupo de más alto riesgo después del cuerpo hospitalario que atiende a pacientes con Covid-19, por lo que deben reforzar las medidas de protección y prevención, aseveró Laurie Ann Ximénez-Fyvie, de la Facultad de Odontología (FO).
Resaltó que los cuidados con sus pacientes y con ellos mismos deben ser adicionales a los que la comunidad o el gremio médico emprenden, debido a su exposición a gotas o microgotas de saliva (indetectables a la vista convencional), al contacto frecuente con superficies y la generación de aerosoles bucales.
Es necesario que los profesionales de la salud bucal atiendan a sus pacientes vía remota, pues todos deben considerarse posibles portadores del coronavirus, aunque no tengan síntomas. Además, “la atención odontológica debe limitarse a sólo emergencias, por lo menos hasta que el primer brote de la pandemia ceda”, subrayó la titular del Laboratorio de Genética Molecular de la FO.
En caso de ser necesaria una consulta, debe ir solamente el paciente, portar cubrebocas y tener un distanciamiento de por lo menos dos metros de distancia con otros asistentes, aunque lo ideal es que en la sala de espera haya sólo uno a la vez; además, esos espacios deben prepararse con los objetos indispensables, como los asientos.