Un estudio en revisión por la revista The Lancet sobre pacientes con Covid-19 en China e información publicada por el sitio de noticias Business Insider, que muestran los resultados del estudio más grande realizado en Estados Unidos sobre ingresos hospitalarios por el Coronavirus, demuestran que la obesidad es el mayor riesgo crónico para la admisión en los hospitales, por encima de las enfermedades cardiovasculares y pulmonares.
El caso de nuestro país la situación puede ser aún más dramática. México tiene un problema de peso y sobrepeso. En 2016 la Secretaría de Salud emitió la emergencia epidemiológica por obesidad y diabetes, a éstas se le suma ahora la de Covid-19, alertó la organización de la sociedad civil Alianza por la Salud Alimentaria.
El 73% de los adultos y el 35% de los niños y adolescentes se encuentran en condiciones de obesidad en México. De acuerdo con el Imco, esto representa una población de 60.6 millones de personas. Un total de 8.6 millones de personas viven con diabetes y 15.2 millones presentan hipertensión.
En el caso de Italia esta cifra alcanza el 10%; esto es 30.1% y 26.1% menos que en nuestro país, respectivamente. ¿Dónde se origina esta susceptibilidad? Los investigadores sugieren que la relación entre el peso y la gravedad de los casos reside en la respuesta inflamatoria de la obesidad en el organismo; la cual puede afectar el sistema inmune y la función pulmonar, críticos en la lucha contra el COVID-19.
La ONG destaca que de acuerdo con expertos, la inflamación es un mecanismo de defensa natural del organismo que ayuda a evitar daños en los tejidos causadas por factores biológicos, físicos y químicos. Para el caso de la obesidad y las enfermedades crónicas, la inflamación es silenciosa, de bajo grado, pero constante.
En este sentido, las enfermedades crónicas generan una hiperactividad de las células del sistema inmune de forma permanente, el cual genera un agotamiento en el mismo, lo que a su vez le impide atacar de manera efectiva enfermedades causadas por patógenos externos, como el COVID-19.
Además, la obesidad puede restringir físicamente la respiración, lo cual es evidentemente problemático si se presenta un caso grave de enfermedades respiratorias, como la antes mencionada.
La dieta saludable debe formar parte de las recomendaciones contra Covid 19
El consumo de alimentos altos en azúcares, grasas, harinas refinadas y otros ingredientes comunes en los alimentos ultraprocesados, aumentan la inflamación.
El estudio precisa que el único factor por encima de este sigue siendo la edad. A partir de los datos obtenidos de 383 pacientes del Tercer Hospital del Pueblo de Shenzhense se concluyó que “la presencia de obesidad estuvo asociada con un mayor desarrollo de neumonía severa en adultos hospitalizados con Covid 19”.
Los pacientes con COVID-19 que presentaban obesidad tenían 86% más de probabilidades de desarrollar neumonía severa. Esto quiere decir que las personas con obesidad tuvieron 2.4 veces más probabilidad de presentar problemas graves al contraer el virus.
El informe recomienda: “Como el Covid 19 continuará difundiéndose alrededor del mundo, los clínicos deben mantener un alto nivel de atención en pacientes obesos.
Por su parte, el estudio realizado por la NYU Grossman School por médicos de la NYU Langone Health Center, aún en espera de revisión por pares, presenta casos específicos del estado de Nueva York, sin embargo, el grupo de estudio es extenso, pues se analizaron las circunstancias de 4,103 personas infectadas por COVID-19 entre el 1 de marzo y el 2 de abril de 2020 en otras regiones de los Estados Unidos.
Del total de los pacientes analizados, aproximadamente la mitad fueron internados en algún centro de salud. En específico, 87% de los pacientes que tenían más de 65 años tuvieron que ser hospitalizados, al igual que el 70% de aquellos que presentaban obesidad y eran mayores de 35 años.
JLP