En un comunicado, la Asociación Nacional de Productores de Refrescos y Aguas Carbonatadas (ANPRAC) pidió que el sector no sea mencionado como el único culpable de la obesidad en México, pues tan sólo el 5.8% de las calorías que consumen diariamente los mexicanos provienen de las bebidas saborizadas, y más del 70% vienen de alimentos y bebidas no industrializadas.

La asociación destacó que representa a 120 empresas mexicanas productoras de refrescos y da empleo a 1.6 millones de personas a nivel nacional.

Mencionó que resulta incoherente considerar a un solo producto, marca o ingrediente, como responsable de un problema tan complejo y multifactorial como la obesidad.

Con referencia al estudio presentado el martes pasado por la Alianza por la Salud Alimentaria, el cual fue publicado por el International Journal of Obesity, la ANPRAC puntualizó que en dicho documento se informa que del 73% de la población mexicana que padece sobrepeso u obesidad, tan solo el 37.5% consume refrescos regulares, lo que implica que el consumo de estos productos no son los principales causantes de los padecimientos descritos.

El organismo empresarial afirmó que “los datos utilizados en la metodología provienen de fuentes de información de otros países, no refleja la genética ni la realidad de nuestra población”.

La Industria Mexicana de Bebidas reiteró su disposición para participar en el llamado del Gobierno Federal a construir una “estrategia de Estado”, que involucre a todos los actores: autoridades, organizaciones civiles e iniciativa privada.