Por Patricia Carrasco
El Reporte Global de la Oficina de las Naciones Unidas contra laDroga y el Delito 2018 publicado hace unas semanas señala que, delas más de 24,000 víctimas detectadas en 2016 en nuestro país,la mayoría siguen siendo mujeres (72%) y que, aunque las víctimassean principalmente mujeres mayores de dieciocho años, el númerode niñas está en aumento.
Datos obtenidos por este Organismo Nacional a partir deinformación solicitada a las procuradurías y fiscalías federal yestatales indican que el número de mujeres víctimas de trata depersonas en México identificadas es aún mayor, representando el85% del total de las víctimas.
Ello lo manifestó el presidente de la Comisión Nacional de losDerechos Humanos, Luis Raúl González Pérez, durante lapresentación del libro “Trata de personas, un acercamiento a larealidad nacional”, al precisar que a nivel nacional, los datosindican que las mujeres adultas representan el 64% de lasvíctimas, mientras que, a nivel internacional, el 49%.
Los hombres adultos son el 9% de las víctimas en México, peroa nivel internacional son el 21%.
Detalló que a partir de la comparación entre los datosnacionales sistematizados por esta Comisión y el nuevo reporte deUNODC es que, en México, el 84% de las víctimas son nacionales,mientras que a nivel internacional, el 58% de las víctimas sonnacionales del país en el que fueron identificadas.
Durante la presentación del libro “Trata de Personas. Unacercamiento a la realidad nacional”, González Pérez expresóque el texto busca aproximar a lo que está sucediendo en el país,“no a partir de las cifras oficiales, o desde lo que escuchamos onos imaginamos, sino partiendo de esa realidad en la que están encontacto directo quienes se enfrentan a las limitaciones e inclusopeligros que implica la defensa de los derechos de las víctimas detrata de personas”.
De ahí que externó: “sabemos que la trata de personas y lasdiversas modalidades de explotación que derivan de ésta seencuentran arraigadas en profundas causas estructurales como ladiscriminación, la violencia de género, la falta de acceso a lasoportunidades, la corrupción y la desigualdad”.
A nivel global, los países están detectando y reportando másvíctimas y sentencian a más tratantes; pero el número depersonas que terminan en procesos de esclavitud y explotación nodisminuye, por el contario va en aumento. Uno de los mayores retosque hemos detectado es que si bien existe una mayorsensibilización en torno a la existencia de la trata de personas,subsiste una escasez de información y apoyo a la investigación enla materia.
