La neumonía continúa siendo un problema importante de salud pública, que afecta principalmente a menores de 5 años y adultos mayores, constituye una de las principales 20 causas de muerte a nivel mundial y el 65% de los casos se presenta en temporada invernal, informó la doctora Ana Isabel Burguete.

Destacó que la lucha contra la neumonía se centra en la prevención, la protección y el tratamiento adecuado, una vez que se produce la infección, por lo que llamó a la población a evitar la automedicación.

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A pesar de que el 70% de los casos de neumonía se pueden tratar de forma ambulatoria; es decir, que no requieren hospitalización, la especialista subrayó que ante la aparición de signos de alarma, como dificultad para respirar, dolor el pecho, náuseas, vómito y diarrea, la persona debe acudir inmediatamente al centro de salud más cercano.

Al participar en el webinar “Temporada Estacional” convocado por la Asociación Nacional de Farmacias de México (Anafarmex), que preside Antonio Pascual Feria, la doctora Ana Isabel Burguete García, jefa de Epidemiología Genética y Enfermedades Crónicas e Infecciones del Instituto Nacional de Salud Pública destacó la importancia de que la población pueda reconocer las manifestaciones clínicas de los diferentes tipos de neumonía y sus agentes causales (virus, bacterias u hongos), para buscar la atención oportuna.

Síntomas leves a graves

Indicó que los síntomas de la neumonía pueden variar de leves a graves, y pueden ir desde fiebre, escalofríos y tos con flema, hasta dificultad para respirar, dolor en el pecho cuando se respira o tose, náuseas y/o vómito, y diarrea. Destacó que estos últimos síntomas son signos de alerta y el paciente puede requerir hospitalización, por lo que recomendó inmediatamente acudir al médico o al centro de salud más cercano.

Explicó que estos síntomas pueden variar dependiendo del grupo de edad. Los recién nacidos y los bebés pueden no mostrar ningún signo de infección. Otros pueden vomitar y tener fiebre y tos, también pueden parecer enfermos, sin energía o estar inquietos, mientras que los adultos mayores que tienen neumonía tienen cambios repentinos en su estado mental (conciencia).

“Es de suma importancia vigilar la aparición de signos y síntomas de neumonía. En caso de identificarlos es necesario solicitar atención médica inmediata y, sobre todo, nunca, nunca automedicarse”, recalcó la doctora Ana Isabel Burguete.

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Para prevenir las neumonías tenemos que implementar estrategias de salud constantes que logren cambiar hábitos de vida y causar un impacto en el resultado final de la atención, por lo que recomendó a la población hacer ejercicio, comer bien, evitar el tabaquismo y vigilar que esté completo el esquema de vacunación de niños menores de 5 años, personas con algún tipo de comorbilidad y adultos mayores esté completo.

Recomendaciones

La especialista recordó que la vacuna conjugada multivalente (13 valencias), o bien, la vacuna de polisacáridos contra neumococo (23 serotipos) se recomienda aplicarse en las siguientes condiciones: a cualquier adulto de 19 a 64 años con tabaquismo activo, EPOC, asma, residente en hogares de ancianos o en hogares de cuidado crónico.

También se recomienda aplicar a: toda persona de 65 años o más, pacientes menores de 65 años con enfermedades de base consideradas de riesgo para la neumonía adquirida en la comunidad, como diabetes mellitus, enfermedad coronaria, insuficiencia cardiaca congestiva, EPOC, con esplenectomía, infección de VIH/Sida, leucemia, linfoma, insuficiencia renal crónica o síndrome nefrótico, así como en pacientes en tratamiento inmunosupresor y revacunación a los cinco años (un único refuerzo) en pacientes que hayan recibido la primera dosis antes de los 65 años.

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Indicó que la OMS recomienda la vacuna contra influenza de forma anual, en todas las personas mayores de 50 años, además, destacó medidas de protección, como lavado de manos, evitar cambios bruscos de temperatura, usar pañuelos desechables y depositarlos en una bolsa dentro del bote de basura, evitar escupir en la calle, tomar abundantes líquidos, aumentar consumo de alimentos ricos en vitamina A y C, como naranja, guayaba, limón, lima, mandarina, jitomate, piña, zanahoria y vegetales verdes.

Procurar una ventilación adecuada en el hogar, en los centros de trabajo y cualquier lugar de reunión, además de evitar la exposición al humo de leña o tabaco.

Vacunación por temporada

Por su parte, el doctor Ricardo Cortés Alcalá, titular de la Dirección General de Promoción de la Salud de la Secretaría de Salud federal detalló que la vacunación en la temporada estacional de invierno para recién nacidos incluye la vacuna contra tuberculosis y hepatitis B mediante inmunización directa, así como tétanos, tos ferina, influenza y Covid, mediante la inmunización materna.

En el caso de menores a partir de los 6 meses y hasta los cinco años se debe aplicar la vacuna contra neumococo e influenza (anual), mientras que en el caso de las personas mayores se debe aplicar neumococo, influenza y Covid, y finalmente en personas jóvenes que viven con comorbilidades se debe aplicar la vacuna contra influenza y Covid.

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