/ jueves 9 de julio de 2020

Normalistas esperan "que no se fabrique otra verdad histórica" del caso Ayotzinapa

Florencio Mejía dijo que la identificación de los restos de Christian Rodríguez da esperanza de dar con los responsables

Aquilino Florencio Mejía, egresado de la normal rural de Ayotzinapa, sostiene que la identificación genética de los restos de Christian Alfonso Rodríguez Telumbre, uno de los 43 desaparecidos en Iguala, Guerrero, da esperanza de dar con los responsables y encontrar a los desaparecidos o a sus restos, aunque advierte: “esperamos que no se fabrique otra verdad histórica, que no sea otra verdad a medias”.

Mejía quien estudio Piscología en la Universidad Iberoamericana Ciudad de México, afirma que es probable que donde se encontraron los restos de Telumbre, haya restos de cientos de desaparecidos y no solo de la normal de Ayotzinapa, “no hay que descartar que sean de otras personas, de otros hechos delictivos que se hayan cometido, sobre todo en Iguala”.

Refiere que el hallazgo de los restos de uno de sus compañeros, es una lamentable noticia para quienes han acompañado la lucha de las madres y padres de familia, así como de los alumnos y exalumnos de Ayotzinapa.

No obstante, para Florencio Mejía, quien cuando ocurrieron los hechos de la noche de Iguala (26 y 27 de septiembre de 2014) era estudiante de cuarto año en Ayotzinapa, el asunto no debe quedar en la identificación de los restos, sino que se debe conocer quiénes fueron los autores intelectuales y materiales, acceder a la verdad y a la justicia, y que haya garantías de no repetición y la debida reparación del daño a los familiares de las víctimas, que llevan ya casi seis años buscando a sus desaparecidos.

Aquilino cree que la familia de Christian Alfonso podría sentir un poco de alivio, porque aunque “suena muy feo”, al menos ya saben en dónde encontraron sus restos y en dónde están. El haber sido identificados científicamente (en el Instituto de Genética de la Universidad de Innsbruck, el 19 de junio) también arroja algo de información, pero habría que investigar más para saber quiénes cometieron el hecho y “por qué actuaron con tanta saña”.

Aunque el fiscal especial para el caso Iguala mencionó que otros restos fueron hallados, Aquilino comentó que probablemente sean de los estudiantes de Ayotzinapa, mas por el momento hay mucha incertidumbre y confusión; sin embargo, “me parece correcto que estén dándole acompañamiento a los familiares y que primero se les esté informando a ellos sobre todo este caso, de cómo va, y que primero se les avise a las familias, antes de dar una noticia”.

Foto: Twitter | @Mboe55

El estudiante de la Ibero, no cree que, si se tienen más restos, sean únicamente de los 43, ya que en Guerrero y en México hay miles de desaparecidos y desaparecidas, y no hay que descartar que sean de otras personas, de otros hechos delictivos que se hayan cometido, sobre todo en Iguala.

Aquilino Florencio Mejía, egresado de la normal rural de Ayotzinapa, sostiene que la identificación genética de los restos de Christian Alfonso Rodríguez Telumbre, uno de los 43 desaparecidos en Iguala, Guerrero, da esperanza de dar con los responsables y encontrar a los desaparecidos o a sus restos, aunque advierte: “esperamos que no se fabrique otra verdad histórica, que no sea otra verdad a medias”.

Mejía quien estudio Piscología en la Universidad Iberoamericana Ciudad de México, afirma que es probable que donde se encontraron los restos de Telumbre, haya restos de cientos de desaparecidos y no solo de la normal de Ayotzinapa, “no hay que descartar que sean de otras personas, de otros hechos delictivos que se hayan cometido, sobre todo en Iguala”.

Refiere que el hallazgo de los restos de uno de sus compañeros, es una lamentable noticia para quienes han acompañado la lucha de las madres y padres de familia, así como de los alumnos y exalumnos de Ayotzinapa.

No obstante, para Florencio Mejía, quien cuando ocurrieron los hechos de la noche de Iguala (26 y 27 de septiembre de 2014) era estudiante de cuarto año en Ayotzinapa, el asunto no debe quedar en la identificación de los restos, sino que se debe conocer quiénes fueron los autores intelectuales y materiales, acceder a la verdad y a la justicia, y que haya garantías de no repetición y la debida reparación del daño a los familiares de las víctimas, que llevan ya casi seis años buscando a sus desaparecidos.

Aquilino cree que la familia de Christian Alfonso podría sentir un poco de alivio, porque aunque “suena muy feo”, al menos ya saben en dónde encontraron sus restos y en dónde están. El haber sido identificados científicamente (en el Instituto de Genética de la Universidad de Innsbruck, el 19 de junio) también arroja algo de información, pero habría que investigar más para saber quiénes cometieron el hecho y “por qué actuaron con tanta saña”.

Aunque el fiscal especial para el caso Iguala mencionó que otros restos fueron hallados, Aquilino comentó que probablemente sean de los estudiantes de Ayotzinapa, mas por el momento hay mucha incertidumbre y confusión; sin embargo, “me parece correcto que estén dándole acompañamiento a los familiares y que primero se les esté informando a ellos sobre todo este caso, de cómo va, y que primero se les avise a las familias, antes de dar una noticia”.

Foto: Twitter | @Mboe55

El estudiante de la Ibero, no cree que, si se tienen más restos, sean únicamente de los 43, ya que en Guerrero y en México hay miles de desaparecidos y desaparecidas, y no hay que descartar que sean de otras personas, de otros hechos delictivos que se hayan cometido, sobre todo en Iguala.