En México se calcula que cada año fallecen 39 mil personas relacionadas con el consumo de alcohol; inclusive el 40.4% de los adultos mexicanos consumen de forma excesiva estos productos y 13.9% de los adolescentes tienen los mismos patrones de exceso.
Ello lo comentaron integrantes de diversas organizaciones de la sociedad civil, que forman parte de la Red de Acción sobre Alcohol (RASA).
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Al presentar los resultados principales de la Encuesta RESET Alcohol México 2024 y el lanzamiento de la campaña “El alcohol daña a quienes más amas”, afirmaron que el 97% de la población mexicana está preocupada por la violencia contra la mujer atribuible al consumo de bebidas embriagantes.
Los activistas urgieron a una política nacional para el control de bebidas alcohólicas, que contribuya a reducir la carga de enfermedad, muerte y violencia asociadas al consumo de alcohol.
Urgen una política nacional para el control de bebidas alcohólicas
Yahaira Ochoa, coordinadora de comunicación en Salud Justa Mx destacó que la inmensa mayoría de los mexicanos (98%) considera al consumo de alcohol como un problema en general, (88%) lo percibe además como algo fácil de conseguir y (60%) como algo relativamente barato.
Expuso que la campaña es con el propósito de resaltar las preocupaciones sobre el consumo de alcohol en nuestra sociedad y sus lamentables consecuencias, destacando la violencia asociada.
Estará presente en redes sociales a través de videos y banners, además de incluirse en rutas de camiones y de un sitio web en donde las personas podrán conocer más sobre los daños a la salud atribuibles al consumo de alcohol. www.accionsobrealcohol.org.
Arturo Sabines vocero de RASA reiteró que el consumo de bebidas alcohólicas es un problema de salud pública que desafía al desarrollo social y económico de muchos países. De acuerdo con la OMS, se estima que cada año mueren 2.6 millones de personas en todo el mundo por causas atribuibles al consumo de alcohol (2 millones fueron hombres y 0,6 millones mujeres).
El consumo de alcohol no sólo causa daños importantes a la persona que lo consume, también es un factor de profunda descomposición social y resaltó que en la actualidad existe un cúmulo de evidencia científica que apoya la relación entre todas las formas de violencia y el consumo de alcohol, precisó que “el consumo de alcohol no sólo está vinculado a los actos de violencia, sino también a su intensificación, la evidencia también sugiere que el consumo de alcohol aumenta la incidencia y la gravedad de la violencia doméstica”.
En los resultados de la encuesta RESET México 2024, realizada por Vital Strategies, vía telefónica se puede leer que entre los principales resultados destacan que el 83% de la población ha consumido alcohol alguna vez en la vida, que el 43% de los adultos ha consumido bebidas alcohólicas en los últimos 30 días y que la bebida que más se consume es la cerveza (el 75% bebe cerveza), seguida del tequila (29%) y el vino (28%).
Alta densidad de puntos de venta de alcohol
En su participación Benjamín González Rubio gerente de comunicación de Vital Strategies refirió que la encuesta reveló que “la gente en México está unánimemente preocupada por los efectos del consumo de alcohol en la violencia contra la mujer, pues el 97% expresa preocupación, y el 81% está muy o extremadamente preocupado”
La campaña es un claro llamado a exigir una política nacional para el control de bebidas alcohólicas, remarcó.
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Alejandro Calvilllo, director de El Poder del Consumidor, destacó que “la ausencia de una política nacional para el control del alcohol en México que regule su publicidad, sus puntos y horarios de venta y que establezca una política fiscal que incorpore al precio de estos productos los enormes costos en salud y sociales que provoca su consumo, ha contribuido al deterioro de la salud de la población y a una profunda descomposición social expresada en la violencia de género, intrafamiliar y comunitaria muy presente en nuestro país”.
El consumo de alcohol en nuestra sociedad se considera como algo normal, pasando por alto las graves consecuencias e impactos que tiene su consumo a nivel social y de salud. La alta densidad de puntos de venta de alcohol se traduce en un incremento en la disponibilidad de bebidas alcohólicas y por tanto en un alto consumo, afirmó.
Yahaira Ochoa, coordinadora de comunicación en Salud Justa Mx destacó la importancia de hacer análisis y, por lo tanto, campañas con perspectiva de género “este problema de salud pública impacta de forma distinta a las mujeres y a los hombres. La violencia doméstica contra las mujeres y el consumo de alcohol tienen impacto directo en nuestra sociedad, tal como lo refleja la encuesta antes mencionada. La evidencia ha demostrado cómo es más probable que las mujeres sufran de violencia por parte de su pareja si está alcoholizada y las riñas callejeras entre hombres alcoholizados son mucho más comunes si hay alcohol de por medio.
Incluso, añadió, la mortalidad por violencia interpersonal atribuibles al consumo de alcohol en el caso de los hombres se ha incrementado en los últimos años”.
Sabines precisó que, a través de RASA, se promoverá la defensa de la salud pública y se sentarán las bases de un contrapeso contra los determinantes comerciales de la salud, en este caso, empresas y grupos del sector alcoholero y sus aliados.
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