A unas horas de que los tres candidatos a la presidencia de la República, Claudia Sheinbaum, Xóchitl Gálvez y Jorge Álvarez Máynez acudan a firmar este lunes el “Compromiso Nacional por la Paz”, la invitación que hace la iglesia católica “es a tomarse en serio este compromiso y a trabajar juntos por la paz más allá de cualquier diferencia política”.
La Arquidiócesis Primada de México resaltó que la violencia que vivimos tiene consecuencias para nuestras comunidades, rompiendo el tejido social, sembrando miedo y desconfianza, y privando a las personas de su dignidad y su derecho fundamental a vivir en paz.
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En el editorial titulado “La paz es un compromiso serio”, publicado en la revista católica Desde la Fe, invita a los candidatos a que reconozcan la gravedad de esta situación y asuman de una manera responsable la búsqueda de soluciones efectivas y duraderas, dando prioridad al diálogo y a la escucha, principalmente de los más vulnerables.
La iglesia católica manifestó que las candidatas y el candidato a la Presidencia, Xóchitl Gálvez, Claudia Sheinbaum y Jorge Álvarez, asuman un compromiso serio con la búsqueda y el mantenimiento de la paz, por todo el pueblo de México.
Agregó que es por ello que, el firmar acuerdos de paz y trabajar incansablemente por su cumplimiento no solo es una necesidad urgente, sino también un deber moral y un imperativo social de los tres candidatos presidenciales.
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Jesucristo nos llamó a amarnos unos a otros, a buscar la reconciliación y a ser constructores de paz. La violencia va en contra de los principios fundamentales del cristianismo y solo puede sembrar más sufrimiento y dolor en nuestras vidas.
Consideró que las candidatas y el candidato a la presidencia tienen la oportunidad de marcar la diferencia y dejar un legado positivo para las futuras generaciones al sumarse y firmar el “Compromiso Nacional por la paz “, no como un acto simbólico, sino como un compromiso serio y tangible con el bienestar de nuestro país.
La paz no puede ser un mero eslogan de campaña, sino un objetivo prioritario que guíe estrategias, acciones y decisiones, un objetivo que además nos llama a todos los que conformamos la sociedad y que no queda únicamente como un deber político, concluyó la Arquidiócesis Primada de México.
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