Caribe mexicano, en alerta por acercamiento de tormenta tropical Zeta

El estado de Quintana Roo declaró la alerta verde y preparaba 71 refugios anticiclónicos en caso de que sea necesario desplazar a turistas o pobladores

AFP

  · domingo 25 de octubre de 2020

@conagua_mx

El Caribe mexicano fue declarado este domingo en alerta por el acercamiento de la tormenta tropical Zeta, que podría convertirse en huracán antes de tocar tierra, entre lunes y martes, a la península de Yucatán, golpeada días atrás por Delta.

El reporte de las 21h00 GMT del Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (NHC) señala que Zeta se encontraba a 480 kilómetros al sureste de la isla mexicana de Cozumel y registraba vientos de 85km/h.

El fenómeno, que se encontraba estacionado afectando a islas del Caribe y a Centroamérica, "podría convertirse en huracán al acercarse a la península de Yucatán", señala el NHC.

Según el pronóstico, Zeta podría tocar tierra en la noche del lunes a martes en el norte de la península, donde se localizan los balnearios de Cancún, Riviera Maya, Tulum y Cozumel.

El martes dejaría territorio mexicano aún como huracán para luego dirigirse a la costa estadounidense, a donde llegaría como tormenta el miércoles, de acuerdo con el pronóstico del NHC.

El estado de Quintana Roo, donde se localizan los balnearios del Caribe mexicano, declaró la alerta verde y preparaba 71 refugios anticiclónicos en caso de que sea necesario desplazar a turistas o pobladores.

La madrugada del 7 de octubre, el huracán Delta tocó tierra cerca de Cancún como categoría 2 (de 5) de la escala Saffir-Simpson sin dejar víctimas, sólo daños materiales.

El paso de huracanes y tormentas suponen un nuevo golpe para estos balnearios, que han visto caer de manera dramática la llegada de visitantes por la pandemia de covid-19. El turismo representa más de 8% del PIB de México.

La temporada de huracanes 2020 en el Atlántico ha impuesto récord de actividad al ser Zeta la tormenta 28.

Se agotaron los nombres previstos para estos fenómenos y los meteorólogos comenzaron a identificarlos con el alfabeto griego.