Históricamente la brecha de género ha sido uno de los problemas más relevantes del mercado laboral, no sólo por la baja participación de mujeres, sino también por las dificultades a las que se enfrentan, como la diferencia salarial y el techo de cristal. Por lo que día a día, las madres trabajadoras luchan por mejores puestos de trabajo.
De acuerdo con información sobre el personal ocupado en las empresas socias de la Asociación Mexicana de Empresas de Capital Humano (AMECH), entre septiembre del 2021 y febrero de este año, se reflejó un decremento en la participación de mujeres.
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En septiembre del 2021, fecha en que se implementó la reforma laboral a la Subcontratación, la participación de mujeres entre la fuerza laboral de los socios de la AMECH era del 46%, en comparación con el 39% de participación femenina al cierre del mes de febrero de 2022; es decir, la participación femenina laboral descendió 7 puntos porcentuales en los últimos seis meses.
Francisco Martínez Domene, secretario de la Asociación Mexicana de Empresas de Capital Humano (AMECH), quien añadió que esta disminución en la participación femenina entre la fuerza laboral de los asociados se debe principalmente a que gran parte de las posiciones que ocupaban las mujeres se encontraban en empresas de los giros de servicios y finanzas.
“Los cuales internalizaron (incorporaron directamente) a gran parte del personal que tenían subcontratado y actualmente las empresas se encuentran en un proceso de adopción lenta en lo que se refiere al uso de los servicios especializados.
En el tercer trimestre de 2021, las mujeres ocupaban el 39% de las posiciones laborales mientras que el 61% estaba ocupado por hombres. Actualmente, las mujeres ocupan un 43.6% de participación laboral; el cual, aún cuando sigue siendo bajo, representa un incremento de 4.6% de un año a otro, revelan cifras del INEGI.
En México hay 51.7 millones de mujeres de 15 años o más edad, de las cuales, cuatro de cada diez (22.8 millones) formaron parte de la Población Económicamente Activa. Y más de 8 millones son madres trabajadoras.
Esta participación (43.6%) corresponde a que sólo 4 de cada 10 mujeres trabajan, sin embargo, a este dato debemos sumar uno que genera mayor preocupación, y es que el 55% de esas mujeres se encuentran empleadas en el mercado de trabajo informal.
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Adicional a esta realidad hay que considerar que en 2020 siete de cada 10 mujeres de 15 años y más han tenido al menos un hijo nacido vivo, lo que corresponde a un 72.4%, de mujeres que son mamás, trabajan y para quienes es necesario contar con un mercado y ambiente laboral más equitativo e igualitario.
En ese panorama, la AMECH está impulsando la legislación del trabajo temporal, como una medida que ayude a reforzar el empleo formal y al mismo tiempo que el porcentaje de participación laboral de mujeres incremente para que se tenga un mejor equilibrio de género.
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