Uno de los aprendizajes más importantes que deja la pandemia de Covid-19 es que la vida y la muerte van de la mano, por lo que la mejor manera de prepararse para ese momento y erradicar miedos, es vivir plenamente, aprovechar cada momento y procurar siempre ser mejores personas.
En el marco de las celebraciones del Día de Todos los Santos y Fieles Difuntos, el 1 y 2 de noviembre, el doctor Felipe Martínez Arronte, especialista en tanatología y presidente de la Asociación Mexicana de Tanatología Ciudad de México, informó que el 90% de las personas pueden resolver su duelo con sus redes de apoyo, mientras que sólo el 10% requerirá algún tipo de ayuda profesional.
“Desde hace más siete meses, la sociedad ha estado viviendo una situación inesperada y difícil, que nos ha llevado a reconocer que la muerte está ahí y, que independientemente de las experiencias que cada quien tenga, la muerte sigue siendo vista como un tema tabú que no se acepta”, explicó el especialista.
“Es precisamente en estas fiestas del 1 y 2 de noviembre que simbolizan a los seres queridos que ya no están, lo que nos recuerda que algún día todos vamos a morir y lo mucho que le ha costado al ser humano aceptarlo”, indicó el doctor Martínez Arronte.
Recomendó entender la situación inédita de la pandemia de Covid-19 como una posibilidad de aprender; aunque reconoció que nadie quisiera que la muerte se presente de la forma en que se ha presentado, con tantas complicaciones, tanto dolor y sufrimiento para muchas familias.
La pandemia ha provocado en muchas personas dificultades para trabajar su dolor y el proceso de duelo, indicó el doctor Felipe Martínez, quien señaló que todo ser humano se enfrentará -en algún momento- a esta experiencia. Recomendó que la mejor forma de hacerlo es vivir este proceso acompañado de amigos, familiares y vecinos.
El duelo es un proceso que cada persona deberá trabajar de manera individual, de acuerdo con su propia historia de vida, y en ello, intervienen varios factores, como es el rol que la persona que murió tenía dentro de la familia, lo que afectará en otros aspectos, apuntó.
“Todos aprendimos que en este momento, el ser humano quiere estar acompañado, pero en muchas ocasiones esto no ha sido por las condiciones de la pandemia, sobre todo, cuando los fallecimientos han ocurrido en hospitales”, indicó el especialista.
Explicó que lo anterior ha provocado otro fenómeno, como es el aumento del miedo de la población a ir a los hospitales cuando tienen una enfermedad, lo que ha retrasado la atención médica de los padecimientos, reduciendo las posibilidades que se tienen para una intervención oportuna.
Ante las condiciones diferentes que se están viviendo, el doctor Felipe Martínez consideró necesario diseñar nuevas estrategias e intervenciones de atención, con el uso de las nuevas tecnologías, para ayudar a las personas en agonía a sentirse amadas por sus seres queridos aunque no los puedan ver.
“Se tienen que buscar recursos para que las personas puedan ver a sus seres queridos virtualmente, a través de un mensajero, un escrito u otra alternativa, a fin de disminuir la incertidumbre y el dolor que está viviendo en ese momento”, apuntó.
Debido a las nuevas circunstancias que ha impuesto la pandemia, y la imposibilidad de que las familias acudan a los velatorios o realicen sus novenarios para despedir a sus seres queridos que han fallecido, el doctor Martínez Arronte destacó que cuando una persona muere se va físicamente, pero siempre estará presente emocionalmente en el recuerdo de sus seres cercanos.
De ahí, que el vínculo que la persona haya tenido con sus seres queridos tendrá un papel importante en el proceso de duelo y aceptación.
“Se habla mucho de cerrar ciclos, pero no estoy muy de acuerdo con este término, porque es parte de la historia de vida y será un proceso que cada quien viva de forma diferente”, indicó.
En este sentido, explicó que las mujeres, por cuestiones culturales y sociales, expresan más lo que sienten, mientras que los hombres expresan su duelo participando y solucionando. Señaló que cuando un ser querido muere deja en cada integrante de su familia algo importante.
“Si hubo daño o algún error que ha dejado una herida abierta, los deudos deberán buscar algunas acciones para poder perdonar, y ahí vienen otros aspectos a trabajarse”, explicó.
El doctor Martínez Arronte precisó que el 90% de las personas pueden resolver su duelo con sus redes de apoyo, y solo el 10% requerirá ayuda profesional, por lo que recomendó en estos casos, acudir con un profesional, para acompañar, escuchar y ayudar a llevar adecuadamente este proceso.
CARACTERÍSTICAS DE LAS DEFUNCIONES REGISTRADASEN MÉXICO DURANTE 2019
En el marco de la celebración del Día de Muertos, el INEGI informó que de las 747 784 defunciones registradas, 56.4% fueron hombres, 43.5% mujeres y en 473 casos el sexo no fue especificado.
Del total de defunciones, 88.8% se debieron a enfermedades y problemas relacionados con la salud, mientras que 11.2% fueron por causas externas, principalmente accidentes, homicidios y suicidios. Las tres principales causas de muerte tanto para hombres como para mujeres son las enfermedades del corazón, la diabetes mellitus y los tumores malignos.
Los homicidios representan la cuarta causa de muerte en hombres. Durante 2019 en México se contabilizaron, mediante los registros administrativos generados a partir de los certificados de defunción suministrados por las oficialías del Registro Civil, los Servicios Médicos Forenses y de los cuadernos estadísticos suministrados por las Agencias del Ministerio Público, un total de 747 784 muertes.