La Resurrección es el momento más significativo de la religión católica, porque con ello se da fin a todas las profecías acerca de Jesús de Nazaret, quien murió a manos de sus enemigos y al tercer día resucitó de entre los muertos y subiendo a la derecha de su padre.
Este pasaje bíblico transportó a los asistentes a aquella época para sentir que vivían el momento en el presente.
LEE TAMBIÉN: Así fue la Pasión de Cristo en el Zócalo [Fotos]
Con la escenificación de la Resurrección y Asunción de Cristo este Sábado de Gloria, se dio por terminada un año más de la representación de la Pasión de Cristo en Iztapalapa.
Al fin, los apóstoles y mujeres que llegaron hasta el sepulcro donde la presencia de Jesús llenará sus corazones de felicidad aunque fuera por unos instantes más, pues Jesús tendría que cumplir con lo último de lo escrito en torno a él: “Subiría para estar a la derecha de su padre”.
Si quieres recibir las noticias en tu Whatsapp, envía la palabra ALTA a este enlace
LA PESADA PIEDRA
De pronto, la pesada piedra que cubría la entrada, sin que nadie la moviera por la parte de afuera, se apartó poco a poco hasta quedar a un lado.
Una esplendorosa luz surgió del interior y apareció el Jesús de Iztapalapa, con ropajes blancos como la espuma del mar, significando la pureza.
No olvides seguirnos en Google Noticias para mantenerte informado
Tiempo más adelante acudió al sepulcro la Virgen María para cambiarle los vendajes y untarle aceite con especias a su cuerpo. Su sorpresa fue enorme al ver que el cuerpo de su amado hijo no se encontraba donde fue colocado luego de su crucifixión.
Instantes después de que nadie creyera en su resurrección, fue entonces cuando el Mesías se le apareció y los reprendió porque dudaron de su palabra, de que resucitaría de entre los muertos, para entrar a la vida definitiva de Dios.
Síguenos en Facebook: La Prensa Oficial y en Twitter: @laprensaoem