Toluca, Méx.-Ya estamos evacuando a todo el personal de gobierno por el temblor. Ya tenemos gente de la Guardia Nacional en apoyo, aviso cualquier relevancia, reportaba un policía estatal vía radio, mientras los trabajadores del gobierno estatal salían caminando después de la alerta sísmica que sonó al filo de las 10:00 horas en la zona centro de la ciudad.
Faltaban 15 minutos para que sonara la alarma e iniciara el macro simulacro por los sismos de 1985 y 2017, y elementos de la Guardia Nacional ya se encontraban frente a palacio estatal, unidades de Protección Civil a un lado de la Catedral de Toluca y patrullas estatales y municipales con las sirenas encendidas en el primer cuadro.
Un funcionario de gobierno municipal se apuraba a rayar con un gis la plancha del zócalo para ubicar a los empleados municipales, que iban a abandonar las oficinas gubernamentales para salvar su vida, derivado de un sismo.
-Ja ja ja, soltaba una carcajada un ciudadano que pasaba por el lugar y murmuraba seguramente si tiembla, cada burócrata va a venir y se va a parar ahí donde le toca, que ilusos, decía mientras cruzaba la Plaza de los Mártires.
Así, mientras sonaban las 10 campanadas de Catedral, la alerta sísmica sonó. Los cuerpos policiacos comenzaron a moverse y sus radios de comunicación no dejaban de sonar. Uno a uno, funcionarios del gobierno estatal salían caminando con orden y tranquilidad.
Mientras un elemento de la Secretaría de Seguridad del Estado de México (SSEM) paraba el tránsito de la avenida Lerdo, Bravo e Independencia, los empleados salían platicando sonrientes.
-A mi me toca acá, vente platicamos y ahorita te vas a tú lugar, le decía una burócrata a su amiga.
-No, es que van a pasar lista y que tal si no estoy. Mejor al rato platicamos, le contestó y se fue a un costado de la fuente ubicada en una de las orillas de la Plaza de los Mártires.
-Esto es un simulacro y lo hacen para que cuando ocurra un temblor, todos salgan y no se queden en sus áreas de trabajo, porque pueden morir aplastados, decía una madre a su pequeña hija que en esos momentos cruzaba por la zona.
El simulacro para los empleados del edificio legislativo duró no más de 10 minutos, mientras que para los trabajadores del GEM y el ayuntamiento, fue de casi 15 minutos. Gracias por apoyarnos en este simulacro, todo salió bien, ya pueden regresar a sus lugares de trabajo, mencionó un funcionario municipal.
Enseguida todo volvió a la normalidad. Según gobierno municipal todo salió muy bien y no tardaron cinco minutos en salir de sus lugares de trabajo inclusive aquellos que por su ubicación tardarían mucho más tiempo.
Todo bien. Saldo blanco. El tiempo fue el adecuado. Todos en orden. Esas fueron las declaraciones más encontradas de las autoridades. Lo cierto es que todo se trató de un simulacro, un ensayo sin consecuencias. En un sismo real, ¿los resultados serían los mismos?