Los principales municipios de la zona conurbada como Tlalnepantla, Naucalpan, Nezahualcóyotl y Ecatepec anunciaron medidas de restricción en los panteones con motivo del festejo del 10 de mayo. Las visitas a los camposantos estarán impedidas y solo se permitirá el acceso a ceremonias de inhumación o cremación, además de que éstas deberán llevarse en un corto tiempo y sin presencia masivas de personas, solo los deudos directos tendrán acceso a los cementerios.
En Tlalnepantla, las autoridades locales indicaron que los panteones permanecerán cerrados hasta nuevo aviso para casos de visitas y celebraciones, por lo que exhortó a la población a abstenerse de tratar de acudir con motivo del 10 de mayo, pues la pandemia se encuentra justo en estos días en los puntos más elevados.
La instrucción del alcalde Raciel Pérez Cruz ha sido la protección permanente de la salud de los habitantes. Pidió a las familias que por esta ocasión se hagan importantes esfuerzos y recordar desde casa la memoria de aquellas mamás, cuyos restos descansan en los panteones municipales.
En tanto, los integrantes del ayuntamiento en Naucalpan, determinaron impedir el acceso a los campos santos del 8 al 15 de mayo para evitar posibles contagios de Coronavirus.
El consejo municipal de emergencia de esa localidad informó, sin embargo, que a pesar de la pandemia, se garantizará la prestación de todos los servicios funerarios a las familias de quienes hayan tenido una pérdida en los últimos días.
El secretario de servicios públicos de Naucalpan, Carlos Trujillo Anell, informó que con esta disposición se refuerzan las medidas de distanciamiento social que forman parte de la fase 3 de la emergencia sanitaria.
La administración de Nezahualcóyotl que preside el alcalde Juan Hugo de la Rosa García también giró instrucciones para que los cementerios mantengan restricciones, la víspera del 10 de mayo, con la intención de no generar condiciones que pudieran desencadenar en focos de infección.
Finalmente, en Ecatepec los servicios en los panteones sólo permanecerán abiertos para atender aquellos casos donde se requieran ceremonias de inhumación o cremación, pero con indicaciones de no concentrar de manera masiva a los dolientes, pues prácticamente los deudos directos serán los únicos que podrán dar el último adiós.