Pobreza y escasos niveles educativos son las principales características de las personas fallecidas por Covid-19 en el Estado de México, entidad que de acuerdo al Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) tiene alrededor de 8 millones de habitantes que sobreviven en situación precaria, lo que eleva el riesgo de que más gente siga muriendo por SARS-Cov-2.
Al hacer un urgente llamado para que los 125 gobiernos municipales, en coordinación con la Secretaría de Salud estatal, adquieran y apliquen la vacuna contra el coronavirus, diputados locales se pronunciaron por frenar la ola de decesos entre los segmentos poblacionales que presentan un estado de vida marginal.
De acuerdo con el Centro Regional de Investigación Multidisciplinaria de la Universidad Nacional Autónoma de México, el 75% de los fallecidos tenía solo un nivel de educación básica, de primaria o secundaria, asociado a empleos mal remunerados sin la oportunidad de quedarse en casa, además de carecer de servicios médicos.
Tal escenario se vuelve aún más dramático si se toma en cuenta el reporte del Coneval donde se advierte que el Estado de México registra más de 7 millones 500 mil habitantes en situación de pobreza, de los cuales 3.5 millones carecen de acceso a los servicios de salud.
Además, el organismo público descentralizado de la administración pública federal refiere que ese universo de familias mexiquenses apenas tiene ingresos económicos inferiores al costo de la canasta alimentaria.
En las estadísticas de los decesos por Covid-19 se observa que estas dos características, bajos niveles educativas y pobreza, han estado incidiendo en gran medida en los índices de fallecimientos.
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Según los datos asentados en los certificados de defunción, los legisladores advierten que la mayoría de víctimas de Covid-19 eran amas de casa, jubilados o pensionados, empleados del sector público, conductores, no ocupados, ayudantes, peones, artesanos, trabajadores de fábricas y personas que se dedican a la reparación o al mantenimiento.
CENSO DE 16 MILLONES
En la reciente información sobre el número de habitantes en el país, dado a conocer a finales de 2020 por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), se revela que el Estado de México cuenta con 16 millones 992 mil 418 personas, aunque de acuerdo con diputados y presidentes municipales la cifra real rebasa los 20 millones.
Las dos principales zonas de la entidad, la del Valle de Toluca y Valle de México, esta última con áreas limítrofes con la Ciudad de México, concentran el grueso de la población de la región centro, pues sumando a los pobladores capitalinos acumulan 24.1 millones de personas. La metrópoli que gobierna Claudia Sheinbaum, según INEGI, tiene 9 millones 200 mil habitantes.
Los dos municipios que encabezan las cifras de la pandemia a nivel Estado de México son Ecatepec el primer lugar y Nezahualcóyotl en segundo sitio; con una población de 1.6 y 1.2 millones de habitantes, localidades cuya característica principal son las zonas marginas en las que viven familias en situación de pobreza.
De acuerdo con los números recientes de la Secretaría de Salud del gobierno federal, a nivel nacional se registran un millón 988 mil 695 casos confirmados y 173 mil 771 defunciones. De estas cantidades 205 mil 654 contagios son del Estado de México, con una cantidad de decesos de 26 mil 740.
En Ecatepec van 27 mil 799 personas que han enfermado de SARS-Cov-2 y 3 mil 897 muertos, mientras que en Neza 22 mil 503 han dado positivo al virus, con un saldo de 2 mil 654 fallecimientos.
REALIDAD INOCULTABLE
“Lo sucedido en los hogares, hospitales y cementerios demuestran una realidad que es imposible ocultar, demuestran la agonía y sufrimiento, reflejada en rostros tristes, preocupados y desencajados por la incertidumbre de tener un familiar enfermo o la llegada de una ausencia permanente sin un adiós digno de un padre, una madre, un hermano o en el peor de los casos de todos ellos, porque el coronavirus no conoce de compasión”, aseguró la legisladora Karla Fiesco García.
Los diputados, junto con sus compañeros del Congreso mexiquense, Brenda Escamilla y el diputado Anuar Azar, manifestaron que es obligatorio actuar con oportunidad y sin miramientos políticos, personales o ideológicos, pues por encima de cualquier interés siempre debe predominar el bien común.
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Pidieron que los 125 municipios sean parte de la jornada nacional de vacunación, “pues el gran reto que implica el coronavirus se debe afrontar desde cada espacio en el gobierno, como ya lo ha realizado la entidad en la asignación presupuestal de 400 millones de pesos para la compra de vacunas”, agregó Brenda Escamilla.
Ante el crítico escenario que envuelve al Estado de México con pobreza y rezago educativo, demandaron a la Secretaria de Salud estatal realizar un convenio con los 125 municipios para la implementación de medidas de seguridad sanitaria, con el objeto de que los ayuntamientos adquieran y apliquen la vacuna contra el virus SARS-CoV-2.