La presidenta de la Comisión de Preservación del Medio Ambiente, Cambio Climático y Protección Ecológica del Congreso de la Ciudad de México, Tania Larios Pérez, promueve una reforma a la Constitución local con el objetivo de incorporar el concepto de “huella hídrica” a su texto para incentivar la captación de aguas pluviales.
Al fundamentar su iniciativa, destacó que es preciso robustecer los criterios de uso sostenible del agua a partir de la incorporación de la huella hídrica en la Constitución de la Ciudad de México, para fomentar que las autoridades implementen políticas públicas enfocadas en la instalación de sistemas para la captación y reutilización del agua proveniente de la lluvia.
La integrante de la bancada del PRI en el recinto de Donceles y Allende argumentó que en las últimas décadas, el crecimiento demográfico, la globalización y el desarrollo tecnológico han tenido consecuencias, entre ellas, una importante es la afectación en el ciclo hidrológico.
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Dejó asentado que el agua es un recurso indispensable para la supervivencia humana, pero también finito y escaso, por lo que es urgente garantizar que en el presente se cuente con agua suficiente y de calidad para satisfacer las necesidades de la población capitalina sin afectar a las siguientes generaciones.
La congresista de la Revolución Democrática expuso que los habitantes de la Ciudad de México consumen en promedio 320 litros de agua al día, muy por encima del promedio de países como Alemania o Francia, que es de 150 diarios.
Al fundamentar lo anterior, dijo que se hace necesario adoptar desde el texto constitucional un enfoque amplio con visión de futuro, que permita conocer y tomar en cuenta el consumo real de agua en la urbe, sobre todo, aquel relacionado con la producción de bienes y servicios para tomar mejores decisiones en el manejo integral del recurso hídrico.
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Señaló que incorporar la huella hídrica al texto constitucional, es una medida necesaria para combatir la escasez a través del uso responsable y de este modo, conservar los recursos naturales, mitigar el cambio climático y promover un desarrollo sostenible.
Tania Larios declaró; “el futuro del agua es el de la seguridad hídrica, se requiere abordar este desafío con una gestión integral, inversiones en infraestructura y una mayor conciencia y participación ciudadana en la conservación y el uso responsable del agua; no enfocarnos en la escasez sino en la responsabilidad de hacer más con menos”.
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Convocó a sus compañeros legisladores a dar un paso hacia adelante y promover en la capital una gobernanza del vital líquido, que garantice la disponibilidad del líquido vital en el futuro y no esperar que el acarreo de agua a través de pipas sea una estrategia de solución al problema de la escasez en la ciudad.
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