/ jueves 10 de diciembre de 2020

Trabajadores de outsourcing limpian Palacio Nacional: MCCI

Son contratados mediante una empresa de terciarización, de las que tanto se ha hablado en las mañaneras

El gobierno federal ha pagado 185 millones de pesos para la subcontratación de al menos 1,500 trabajadores de limpieza a través de Decoaro y Supervisión SA de CV, una compañía de outsourcing que aportó como su domicilio fiscal un mini-departamento en Iztacalco en el que según los vecinos nunca ha existido una empresa, informó Mexicanos contra la Corrupción y la Impunidad.

Entre 2019 y 2020, Decoaro ha recibido 23 contratos del Servicio de Administración Tributaria, del Instituto Nacional de Migración, de la Comisión Nacional de Hidrocarburos y de las Secretarías de Turismo, Relaciones Exteriores y Comunicaciones y Transportes. Nunca antes había tenido asignaciones públicas.

De acuerdo a una investigación de Raúl Olmos, Alejandra Barriguete y Valeria Durán uno de esos contratos lo asignó la Presidencia de la República para la limpieza del interior de Palacio Nacional, donde reside y despacha el presidente Andrés Manuel López Obrador, quien ha condenado en forma reiterada la subcontratación de empleados a través de outsourcing porque considera que es un mecanismo de explotación laboral, en el que los patrones se deslindan de sus responsabilidades.

El gobierno del presidente López Obrador subcontrata personal de limpieza, que nunca antes había obtenido contratos públicos ni se dedicaba al giro de la limpieza, cuenta además con denuncias ante el Instituto Mexicano del Seguro Social, (IMSS) por no dar las debidas prestaciones a los afanadores.

En la investigación de MCCI se puede observar que en el contrato firmado el 3 de marzo de 2020 por la Presidencia de la República, ésta aceptó que Decoaro le pagara un sueldo de 123 pesos diarios a los trabajadores de limpieza de Palacio Nacional –que corresponde al salario mínimo oficial– además de deslindarse de cualquier vínculo laboral con los esos trabajadores.

“El proveedor reconoce y acepta ser el único patrón de todos y cada uno de sus trabajadores que intervienen en el desarrollo y ejecución de los servicios pactados en el presente contrato, en forma tal, que deslinda de toda responsabilidad a la Oficina de la Presidencia, respecto de cualquier reclamo que en su caso puedan efectuar sus trabajadores derivado de las disposiciones legales y demás ordenamientos en materia de trabajo y de seguridad social”, se lee en la cláusula décima segunda del contrato, obtenido MCCI.

La empresa de outsourcing Decoaro asignó 31 empleados para la limpieza del interior de Palacio Nacional y de otros seis inmuebles que la Presidencia tiene en avenida Constituyentes, en la colonia Roma, en la calle República de Guatemala y una mansión que perteneció a Manuel Ávila Camacho en el fraccionamiento La Herradura, en Huixquilucan.

La Presidencia se comprometió a pagar en 2020 a dicha empresa 7 millones 472 mil pesos por la subcontratación de los afanadores.

Francisco Javier Martínez Estrada, subdirector de Servicios Generales de la Presidencia y uno de los firmantes del contrato, aseguró que Decoaro ha ofrecido sin mayor problema el servicio de limpieza, el cual concluye en diciembre de 2020.

Detalló que MCCI buscó a los dueños y al representante legal de la empresa, pero no se les localizó ni en los domicilios ni en el teléfono que aportaron a la Presidencia.

Decoaro se dedicaba originalmente a servicios de construcción y cambió al giro de limpieza en los meses previos al inicio del actual gobierno federal. En las anteriores administraciones no había recibido ni un peso en contratos gubernamentales, según corroboró MCCI en Compranet y en la Plataforma Nacional de Transparencia.

El representante de Decoaro y Supervisión SA de CV, Gonzalo Arrevillaga Falcón, declaró en el contrato firmado con la Presidencia de la República que la empresa de outsourcing tenía su domicilio fiscal en la calle Azafrán 489, edificio C, interior 304, en la colonia Granjas México, en la alcaldía de Iztacalco.

El mismo domicilio aparece en las hojas membretadas, en las que la empresa presentó su propuesta económica, así como en otros procedimientos de contratación con otras dependencias federales.

Sin embargo, ese domicilio corresponde a un departamento donde habitan dos mujeres (madre e hija), y no a una empresa, constató MCCI en distintas visitas realizadas al inmueble.

El departamento que Decoaro reportó como su domicilio está en un conjunto habitacional de cuatro edificios, ubicado entre dos bodegas. Los inquilinos del edificio C de ese conjunto confirmaron que en ese departamento nunca ha operado una empresa.

El gobierno federal ha pagado 185 millones de pesos para la subcontratación de al menos 1,500 trabajadores de limpieza a través de Decoaro y Supervisión SA de CV, una compañía de outsourcing que aportó como su domicilio fiscal un mini-departamento en Iztacalco en el que según los vecinos nunca ha existido una empresa, informó Mexicanos contra la Corrupción y la Impunidad.

Entre 2019 y 2020, Decoaro ha recibido 23 contratos del Servicio de Administración Tributaria, del Instituto Nacional de Migración, de la Comisión Nacional de Hidrocarburos y de las Secretarías de Turismo, Relaciones Exteriores y Comunicaciones y Transportes. Nunca antes había tenido asignaciones públicas.

De acuerdo a una investigación de Raúl Olmos, Alejandra Barriguete y Valeria Durán uno de esos contratos lo asignó la Presidencia de la República para la limpieza del interior de Palacio Nacional, donde reside y despacha el presidente Andrés Manuel López Obrador, quien ha condenado en forma reiterada la subcontratación de empleados a través de outsourcing porque considera que es un mecanismo de explotación laboral, en el que los patrones se deslindan de sus responsabilidades.

El gobierno del presidente López Obrador subcontrata personal de limpieza, que nunca antes había obtenido contratos públicos ni se dedicaba al giro de la limpieza, cuenta además con denuncias ante el Instituto Mexicano del Seguro Social, (IMSS) por no dar las debidas prestaciones a los afanadores.

En la investigación de MCCI se puede observar que en el contrato firmado el 3 de marzo de 2020 por la Presidencia de la República, ésta aceptó que Decoaro le pagara un sueldo de 123 pesos diarios a los trabajadores de limpieza de Palacio Nacional –que corresponde al salario mínimo oficial– además de deslindarse de cualquier vínculo laboral con los esos trabajadores.

“El proveedor reconoce y acepta ser el único patrón de todos y cada uno de sus trabajadores que intervienen en el desarrollo y ejecución de los servicios pactados en el presente contrato, en forma tal, que deslinda de toda responsabilidad a la Oficina de la Presidencia, respecto de cualquier reclamo que en su caso puedan efectuar sus trabajadores derivado de las disposiciones legales y demás ordenamientos en materia de trabajo y de seguridad social”, se lee en la cláusula décima segunda del contrato, obtenido MCCI.

La empresa de outsourcing Decoaro asignó 31 empleados para la limpieza del interior de Palacio Nacional y de otros seis inmuebles que la Presidencia tiene en avenida Constituyentes, en la colonia Roma, en la calle República de Guatemala y una mansión que perteneció a Manuel Ávila Camacho en el fraccionamiento La Herradura, en Huixquilucan.

La Presidencia se comprometió a pagar en 2020 a dicha empresa 7 millones 472 mil pesos por la subcontratación de los afanadores.

Francisco Javier Martínez Estrada, subdirector de Servicios Generales de la Presidencia y uno de los firmantes del contrato, aseguró que Decoaro ha ofrecido sin mayor problema el servicio de limpieza, el cual concluye en diciembre de 2020.

Detalló que MCCI buscó a los dueños y al representante legal de la empresa, pero no se les localizó ni en los domicilios ni en el teléfono que aportaron a la Presidencia.

Decoaro se dedicaba originalmente a servicios de construcción y cambió al giro de limpieza en los meses previos al inicio del actual gobierno federal. En las anteriores administraciones no había recibido ni un peso en contratos gubernamentales, según corroboró MCCI en Compranet y en la Plataforma Nacional de Transparencia.

El representante de Decoaro y Supervisión SA de CV, Gonzalo Arrevillaga Falcón, declaró en el contrato firmado con la Presidencia de la República que la empresa de outsourcing tenía su domicilio fiscal en la calle Azafrán 489, edificio C, interior 304, en la colonia Granjas México, en la alcaldía de Iztacalco.

El mismo domicilio aparece en las hojas membretadas, en las que la empresa presentó su propuesta económica, así como en otros procedimientos de contratación con otras dependencias federales.

Sin embargo, ese domicilio corresponde a un departamento donde habitan dos mujeres (madre e hija), y no a una empresa, constató MCCI en distintas visitas realizadas al inmueble.

El departamento que Decoaro reportó como su domicilio está en un conjunto habitacional de cuatro edificios, ubicado entre dos bodegas. Los inquilinos del edificio C de ese conjunto confirmaron que en ese departamento nunca ha operado una empresa.