A partir de hoy a todo el personal que labora en obras públicas en el Estado de México se le tomará la temperatura corporal tres veces al día, además de que se aplicará la rotación de trabajadores y se vigilará el distanciamiento entre los empleados, como parte de un protocolo de prevención ante el riesgo de infección por Coronavirus.
Así los dio a conocer la Secretaria de Obra Pública de la entidad, al manifestar que las empresas de la construcción deben designar a un responsable en cada obra, quien deberá observar y registrar la implementación de acciones preventivas frente a la pandemia.
El protocolo está dirigido a las empresas de construcción, con el fin de que éstas implementen medidas de higiene y sanidad en las obras públicas que estén en proceso, durante la contingencia por la pandemia.
El titular de la dependencia, Rafael Díaz Leal Barrueta, aseguró que la prioridad es la salud de los mexiquenses, al tratar de evitar por todas las vías los riesgos de contagios en las zonas donde se llevan a cabo obras de construcción.
Destacó que esta medida también fortalece el compromiso del gobierno estatal de hacer lo posible para que la obra pública y el desarrollo de infraestructura esencial no se detengan, lo que beneficia la economía estatal y a la de las familias de quienes trabajan en esta importante industria.
El responsable en cada obra deberá, además, observar que se respete el número máximo de trabajadores en las áreas laborales, así como la limpieza de espacios generales y zonas para comer.
Estas acciones complementan las recomendadas por las autoridades de salud estatales y federales, particularmente aquellas que tienen que ver con los traslados a los sitios de trabajo.
JLP