El Sistema de Aguas de la Ciudad de México (Sacmex) reforzó la vigilancia en los pozos de agua en donde las pipas pueden surtirse para impedir actos de corrupción.
Operadores de pipas particulares en la Ciudad de México compran los derechos para vender agua proveniente de pozos con garza de la capital del país a través de vales emitidos por el Sacmex y pueden ganar hasta mil pesos por cada pipa que surten.
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Para obtener los vales del suministro de agua, los dueños de las pipas particulares deben pagar a la tesorería de la Ciudad de México 71.47 pesos por metro cúbico de agua, según señala el Código Fiscal vigente en la capital del país. Esto implica que, por un carro tanque de 10 mil litros, los piperos pagan al Sacmex 714 pesos, pero la venden en un costo promedio de dos mil pesos.
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Rafael Carmona Paredes, titular de Sacmex, señaló en entrevista con la Organización Editorial Mexicana (OEM), que ante la alta demanda del abastecimiento de agua a través de pipas y de quienes pretenden cargar sin el vale correspondiente, reforzó la vigilancia en las garzas localizadas en los pozos, para evitar abusos por parte de los piperos.
“Hay una vigilancia muy fuerte por personal del Sacmex que están presentes en los pozos que tienen garza, para asegurar que todas las pipas tienen un vale. Hemos reforzado esa vigilancia, pidiendo a nuestro personal que destine parte de sus horas de trabajo en estos lugares donde se hace la carga de pipas, de tal manera que no nada más estén los operadores de los pozos y de las garzas, sino personal destinado a la vigilancia de la buena operación en términos de que todas las pipas que carguen tengan un vale.
“Y no sólo eso, sino de que regrese el operador con un código que le debe entregar el usuario o la persona a la que se le entrega esa pipa, le debe entregar un código al pipero, para que de regreso entregue ese código al personal de la pipa, para garantizar que entregó efectivamente el agua”, detalló.
Actualmente, la capital del país cuenta con 61 pozos que tienen la instalación llamada “cuello de garza”. De éstas, 39están habilitadas para la carga de pipas operadas por el Sacmex y el resto para las alcaldías.
"Que con eso (el vale) demuestre que cumplió con la entrega del agua. No nada más que salió con la pipa cargada y que regresó a cargar nuevamente, hay un proceso de reforzamiento de la vigilancia del comportamiento de las mismas operadoras de los pozos y las garzas y del comportamiento de los mismos piperos para asegurar que el agua llegue a su destino", afirmó.
Cuestionado sobre la compra de agua a través de vales, Rafael Carmona señaló que la capacidad de carga de las pipas está determinada por el número de garzas en operación, de tal manera que no puede haber más garzas de las existentes.
“No podemos tener muchas más garzas de las que ya hablamos, porque nos quita agua que debe circular por la red, entonces, hay un límite natural establecido por la cantidad de agua que tenemos”, afirmó.
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El funcionario señaló que la falta de agua que actualmente vive la Zona Metropolitana del Valle de México es el reto más grande en el tema hídrico de los últimos 10 años, además la reducción en el volumen de lluvias de los últimos cuatro años debe tomarse en cuenta para decidir cómo actuar en los siguientes.
En ese sentido, aseveró que todas las acciones realizadas actualmente para abatir las afectaciones de la temporada de estiaje serán permanentes, y servirán de base en espera de la época de lluvias.
“Todos los esfuerzos que estamos haciendo están dirigidos no sólo a cubrir lo que tengamos en este estiaje, sino que todas estas recuperaciones de los pozos, abrir nuevas posibilidades de tener más agua como la ampliación de la planta potabilizadora Madín, son acciones que serán permanentes, que no están destinadas nada más a esta temporada de estiaje, sino que serán base para continuar a la siguiente parte del ciclo hidrológico que tiene nuestro valle de México, la cual es la época de lluvias, en la que definitivamente todas las acciones que estamos haciendo ahorita seguirán operando, se mantendrán, independientemente de la cantidad de agua que pueda llegar al sistema Cutzamala y a la recuperación de los niveles que se tengan en las presas”, expuso.
Carmona también aseguró que la ciudad pierde menos agua en fugas. El Sacmex inyecta gas helio a las tuberías para que a su salida se detecte la fuga, ese sistema redujo la pérdida de agua de 45 por ciento en 2019 a 37 este año.
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“Las fugas vienen en porcentajes muy diferentes. En distintas zonas de la ciudad hay más pérdidas de agua en aquellos sitios en donde hay más presión y hay muy pocas pérdidas de agua en zonas en donde la presión es baja.
Lo que más hemos podido recuperar por la reducción de fugas ha sido en mucho a través del control de presiones, la misma sectorización nos ha permitido ya tener un control de presiones en estas colonias del poniente de la ciudad y con ello recuperar caudales muy importantes en la parte media”.
Nota publicada originalmente en El Sol de México
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