La floricultura, uno de los sectores más sensibles y afectados por la pandemia, registra considerables pérdidas de hasta 90 por ciento en su producción en la presente temporada, además de que la cuarentena tiene arrinconadas a su suerte a decenas de familias de la zona Tierra Caliente-sur del Estado de México.
Así lo declaró Juan Pedro Martínez Soto, dirigente del sector, quien señaló que esta crisis la están padeciendo campesinos de Tenancingo, Villa Guerrero y Zumpahuacán entre otros municipios, por la falta de ventas.
Agregó que tal situación se agudiza por factores como la falta de apoyo, como el poco nutriente que recibieron las flores del suelo, pues recordó que en años anteriores tuvieron una ganancia satisfactoria que les permitió cubrir sus gastos y continuar con este negocio.
Al respecto, Manuel Millán, trabajador del campo en la comunidad de San Francisco el Zarco, Tenancingo, dijo que todos ellos se encuentran muy afectados por la epidemia, por lo que hizo un llamado a la autoridad estatal para que recuerde la petición de insumos desde finales del 2019.
Reconoció, que si bien el Covid-19 es una de las causas para que la economía de las personas esté en riesgo, también afirmó que esta situación no fuera tan grave si se hubiese sembrado en otras condiciones como en los años anteriores, cuando fue dotado fertilizante y semilla mejorada para abonar sus parcelas.
En relación a esta problemática, cabe mencionar que algunos floricultores se han visto en la necesidad de salir de sus comunidades y municipios arriesgando su salud para vender algunos cuantos ramos de flores a precios muy bajos en camellones o semáforos, en donde la afluencia de gente es muy poca.
JLP